TEGUCIGALPA (AP) — La oposición hondureña criticó el viernes la amenaza de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, de cerrar la base militar de Estados Unidos en ese país centroamericano si el presidente electo Donald Trump realiza deportaciones masivas de hondureños.
“La presidenta Castro nos ha puesto en grave peligro, porque lo que ha hecho es hacer una declaración de guerra por temas ideológicos y personales y eso es un error”, dijo a The Associated Press el precandidato presidencial por el Partido Liberal de Honduras (PLH), Jorge Cálix. Honduras celebrará elecciones generales el 30 de noviembre.
El miércoles, en un mensaje a la población con motivo del Año Nuevo, Castro sostuvo que “frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un solo centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”.
La mandataria dijo que esperaba que Trump sea tenga un diálogo constructivo y amistoso con su gobierno.
Cálix destacó la labor de la base militar estadounidense y recordó que en la de Palmerola, en el departamento de Comayagua, hay unos 1.000 efectivos de Estados Unidos y Honduras que coordinan operativos antinarcóticos no sólo en el país sino en toda la región de Centroamérica.
En la misma línea se expresó el analista Olban Valladares, quien analiza buscar la candidatura a la presidencia por el Partido Innovación y Unidad (PINU) y calificó de imprudente e inoportuna la reacción de la presidenta.
“Ella sabe que no tenemos la capacidad para amenazar a Estados Unidos de ninguna manera, que los perjuicios que se ocasionarían para Honduras serían terribles”, manifestó y consideró que la advertencia de la mandataria afecta no sólo a los migrantes sino también a los hondureños que reciben remesas de sus familiares en Estados Unidos.
“Ella debe pensar en la población hondureña y apegarse a los principios de la diplomacia. La interpretación de doña Xiomara es absurda”, agregó. “Cómo es posible que ellas esté argumentando que está defendiendo a los migrantes, cuando lo que está haciendo es poniéndolos en peligro de que más rápido los deporten de Estados Unidos”, subrayó Valladares.
Por su parte, Cálix sostuvo que amenazar a Estados Unidos, donde viven más de dos millones de hondureños, "es un acto supremo de irresponsabilidad, porque con una orden ejecutiva Estados Unidos puede cerrarnos la llave de las remesas”.
El Banco Central de Honduras reportó en agosto que en 2023 los hondureños habían recibido 9.177 millones de dólares en remesas y que en el 91,1% de estos envíos de dinero el origen fue Estados Unidos.
Cálix apuntó que la amenaza de Castro también podría estar vinculada con la protección de “su familia y los negocios familiares” y sostuvo que "todo esto comenzó con la eliminación de la extradición para proteger a su cuñado”.
El 28 de agosto de 2024 la presidenta Castro ordenó denunciar el tratado de extradición con Estados Unidos. Días más tarde su cuñado Carlos Zelaya, hermano del expresidente Manuel Zelaya (2006-2009) y esposo de la mandataria, apareció en un video en el que presuntamente negociaba un soborno con varios reconocidos narcotraficantes.
En el video, grabado hace 11 años, se escucha cuando los narcotraficantes, la mayoría actualmente pagando penas de cárcel en Estados Unidos, ofrecen dinero a Carlos Zelaya y éste responde que “la mitad será para el comandante”, en alusión a su hermano, el expresidente.