El volcán Láscar en el norte de Chile subió de la categoría de alerta amarilla a naranja ante el registro de actividad y se amplió el perímetro de seguridad a un radio de 10 kilómetros, anunciaron el sábado las autoridades.
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En la noche del viernes las estaciones de monitoreo registraron “un aumento en la sismicidad, principalmente aquella asociada con la dinámica de fluidos al interior del sistema volcánico”, señaló Álvaro Amigo, subdirector nacional de Geología y Minería (Sernageomin).
El servicio especializado en el monitoreo de volcanes señaló además que se esperan posibles pulsos eruptivos con columnas que superen los 5 kilómetros de altura, proyección de bloques balísticos y dispersión de ceniza en el entorno del volcán. La alerta naranja es inmediatamente inferior a la alerta roja, que significa riesgo de erupción.
Sin embargo, tras una reunión para estudiar la situación, las autoridades ampliaron el perímetro de seguridad del volcán de 5 a 10 kilómetros.
El volcán Láscar está situado en la región norteña de Antofagasta, a unos 70 kilómetros del pueblo turístico de San Pedro de Atacama, que recibe miles de viajeros todos los años para ver sus paisajes desérticos y sus cielos limpios donde pueden observarse con mucha claridad las estrellas. Se encuentra a más de mil 600 kilómetros al norte de Santiago.
En este momento otro volcán en el país, el Villarica, en el sur, se encuentra en alerta amarilla.
Chile cuenta con una de las cadenas volcánicas más importantes de la Tierra y en su territorio se contabilizan más de 2 mil volcanes de los cuales 90 son potencialmente peligrosos. El Sernageomin monitoriza de manera constante 45 de ellos.