DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — Las Naciones Unidas suspendieron el viernes todos los viajes a las áreas controladas por los rebeldes hutíes de Yemen después de que más miembros de su personal fueran detenidos por los rebeldes.
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Los hutíes ya habían detenido a miembros del personal de la ONU, así como a individuos asociados con la embajada de Estados Unidos que anteriormente estaba abierta en Saná, la capital de Yemen, y a grupos de ayuda.
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“Ayer, las autoridades de facto en Saná detuvieron a personal adicional de la ONU que trabajaba en áreas bajo su control”, se lee en el comunicado de la ONU. “Para garantizar la seguridad y la protección de todo su personal, las Naciones Unidas han suspendido todos los movimientos oficiales hacia y dentro de las áreas bajo el control de las autoridades de facto”.
Antes del viernes, un total de 16 miembros del personal yemení de la ONU se encontraban bajo detención de los hutíes. Los miembros del personal estaban tratando de realizar un recuento en las agencias de la ONU que trabajan en el país y habían detenido su trabajo, que proporciona alimentos, medicinas y otra ayuda a la nación empobrecida.
En junio, la ONU reconoció que 11 empleados yemeníes fueron detenidos por los hutíes en circunstancias poco claras a medida que los rebeldes intensificaban su represión en las áreas bajo su control. Varias decenas de otros miembros de agencias de ayuda y otras organizaciones también están detenidos.
La ONU agregó que estaba “interactuando activamente con representantes de alto nivel” de los hutíes, quienes han controlado la capital de Yemen desde 2014. Los rebeldes respaldados por Irán han estado en guerra con una coalición liderada por Arabia Saudí que lucha en nombre del gobierno exiliado del país desde 2015.
Los hutíes no reconocieron de inmediato la decisión de la ONU, que se produjo mientras intentaban de otra manera reducir la intensidad de sus ataques contra la navegación e Israel después de que se alcanzara un cese del fuego en la guerra entre Israel y Hamás.
Por otra parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha movido para reinstaurar una designación de terrorismo que hizo al grupo al final de su primer mandato y que había sido revocada por el expresidente Joe Biden, lo que potencialmente prepara el escenario para nuevas tensiones con los rebeldes. No estaba claro si los hutíes consideraban que las detenciones de la ONU estaban vinculadas con la decisión.
A principios de la semana, los hutíes señalaron que limitarían sus ataques contra los barcos en el corredor del mar Rojo y liberaron a la tripulación de 25 miembros del Galaxy Leader, un barco que habían capturado en noviembre de 2023.
Sin embargo, los hutíes han llevado a cabo una campaña dirigida a aquellos con vínculos occidentales desde hace algún tiempo.
El grupo ha estado transmitiendo programas repetidos en los canales de televisión que controlan, mostrando a personas que describen como colaboradoras de las agencias de inteligencia occidentales o de los israelíes.
La guerra en Yemen ha matado a más de 150.000 personas, incluidos combatientes y civiles, y ha creado una de las peores catástrofes humanitarias del mundo, matando a decenas de miles más.
Los ataques de los hutíes a la navegación durante la guerra entre Israel y Hamás han ayudado a desviar la atención de sus problemas internos. Pero han sufrido bajas y daños por los ataques aéreos liderados por Estados Unidos dirigidos al grupo durante meses, así como otros ataques por parte de Israel.
Miles han sido encarcelados por los hutíes durante la guerra. Una investigación de The Associated Press encontró que algunos detenidos fueron quemados con ácido, obligados a colgar de sus muñecas durante semanas o golpeados con bastones. Mientras tanto, los hutíes han empleado a niños que fungen como soldados y han colocado indiscriminadamente minas.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
