IRBIL, Irak (AP) — Líderes de dos grupos kurdos anteriormente rivales se reunieron en el norte de Irak el jueves en un aparente paso hacia la reconciliación en un momento en que la agitación política en Siria ha dejado a los kurdos enfrentando un futuro incierto.
Hoshyar Zebari, funcionario del Partido Democrático del Kurdistán, describió la reunión entre el líder del PDK, Masoud Barzani, y Mazloum Abdi, comandante de las Fuerzas Democráticas Sirias, o FDS, como un “logro significativo para fortalecer la unidad y posición kurda” durante la fase de transición en Siria.
La reunión en Irbil, la capital de la región kurda semiautónoma en el norte de Irak, ocurrió semanas después de la caída del gobierno de Bashar Assad en una ofensiva relámpago por grupos insurgentes y en medio de una campaña intensificada por grupos armados respaldados por Turquía contra las fuerzas kurdas en el noreste de Siria.
No hubo un comunicado oficial del PDK o FDS respecto a la reunión.
Un miembro senior del PDK, que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado para informar a los periodistas, relató que las conversaciones entre Barzani y Abdi se centraron en unificar la posición kurda dentro de Siria y explorar maneras de separar a las FDS del Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK, un grupo militante separatista kurdo designado como organización terrorista por Turquía. Dijo que el líder del KDP había argumentado que tal decisión podría abrir puertas para un apoyo internacional más amplio, particularmente a través de las relaciones del PDK tanto con Estados Unidos como con Turquía.
El funcionario añadió que Barzani también había enfatizado la importancia de presentar un frente unido de los kurdos en Siria para negociar con el nuevo gobierno desde una posición de fuerza. Dijo que los logros políticos de los kurdos en Irak, incluyendo el reconocimiento constitucional, podrían servir como modelo para los kurdos en Siria.
Las FDS lideradas por kurdos, que han controlado el noreste de Siria durante la última década, están bajo ataque del Ejército Nacional Sirio, un conglomerado de milicias que luchan en nombre de Turquía, que considera a las FDS como una extensión del PKK.
Al mismo tiempo, las conversaciones entre políticos del partido prokurdo de Turquía y líderes kurdos encarcelados han estado cobrando impulso mientras intentan poner fin a 40 años de lucha entre el estado y el PKK.
Tras la caída de Assad, hay preocupaciones sobre un resurgimiento del grupo Estado Islámico en Irak y Siria. Las fuerzas kurdas han desempeñado un papel clave en la lucha contra el grupo militante en ambos países.
Los acontecimientos regionales han creado una creciente presión para que las facciones kurdas dejen de lado sus diferencias políticas.
A principios de esta semana, el enviado de Barzani, Hamid Darbandi, se reunió con Abdi en Hasaka, en el noreste de Siria. El PDK en Irak tiene relaciones amistosas con Turquía y ha estado en desacuerdo con las FDS y otros grupos alineados con el PKK.
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Qassim Abdul-Zahra reportó desde Bagdad.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.