SEÚL, Corea del Sur (AP) — Corea del Norte disparó varios misiles de prueba el martes hacia sus aguas orientales, informó el ejército surcoreano, en el que sería el segundo lanzamiento norcoreano de misiles de este año.
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El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur indicó que los misiles balísticos de corto alcance fueron lanzados desde una zona interior del norte y volaron unos 250 kilómetros (155 millas), antes de caer en aguas entre la península de Corea y Japón.
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El Estado Mayor señaló que el ejército surcoreano ha fortalecido la vigilancia y que compartía la información del lanzamiento con los ejércitos de Estados Unidos y Japón. Dijo que condena enérgicamente la prueba, a la que llamó una “clara provocación” que representa una grave amenaza para la paz y estabilidad de la región.
Fue el segundo evento norcoreano de lanzamientos en 2025, luego de un lanzamiento balístico la semana pasada.
Corea del Norte indicó que la prueba del 6 de enero fue de un nuevo misil hipersónico de alcance intermedio diseñado para atacar blancos remotos en el Pacífico, como parte del programa norcoreano para ampliar su arsenal de armas capaces de portar ojivas nucleares.
El año pasado fue intenso para Pyongyang en lo que respecta a pruebas de armamento. Los sistemas que demostró en 2024 incluyeron misiles balísticos intercontinentales de combustible sólido diseñados para alcanzar el territorio continental de Estados Unidos, y varios misiles de corto alcance pensados para abrumar las defensas antimisiles en Corea del Sur. Hay preocupaciones de que sus capacidades militares pudieran progresar aún más por medio de transferencias de tecnología de Rusia, ya que los dos países se han alineado respecto a la guerra en Ucrania.
En una conferencia política de fin de año, Kim prometió implementar la política más dura contra Estados Unidos, y criticó los empeños del gobierno del presidente Joe Biden para fortalecer la cooperación de seguridad con Seúl y Tokio, de los que dijo son un bloque militar nuclear para la agresión.
Durante su primer mandato como presidente de Estados Unidos, Donald Trump se reunió tres veces con Kim para conversar sobre el programa nuclear norcoreano.
Incluso con el regreso de Trump a la Casa Blanca, es poco probable que haya una reanudación rápida de la diplomacia con Corea del Norte. La posición fortalecida de Kim —basada en su arsenal nuclear expandido, la alianza profunda con Rusia y el debilitamiento de la aplicación de las sanciones internacionales de Estados Unidos— presenta nuevos retos para solucionar el punto muerto en la cuestión nuclear, dicen expertos.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de la AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.