BEIJING (AP) — Los equipos de rescate buscaban el miércoles a más sobrevivientes y víctimas en el Tíbet, una fría región a gran altura en el oeste de China, un día después de un potente sismo cerca de una ciudad sagrada para budista tibetanos que causó al menos 126 muertos y arrasó miles de viviendas.
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Se repartieron tiendas de campaña, edredones y otros artículos de emergencia para proporcionar cobijo a aquellos cuyas casas son inhabitables o inseguras. Las temperaturas cayeron muy por debajo del punto de congelación durante la noche en una zona con una altitud media de unos 4.200 metros (13.800 pies).
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Hasta el martes en la noche, la cifra confirmada de muertos era de 126 personas, con 188 heridos más. El terremoto afectó a Xigaze, la sede tradicional del panchen lama, la segunda figura más importante del budismo tibetano. Por el momento se desconocía si estaba en su monasterio de Tashi Lhunpo en el momento del sismo ni el alcance de los daños en la ciudad. Xigaze, que se extiende a través de una llanura a gran altura, está a unos 25 kilómetros (15 millas) del epicentro.
El gobierno chino y los seguidores del dalai lama, la máxima figura del budismo tibetano, han estado enfrentados por quién debería ocupar la posición de panchen lama desde que un niño designado por el dalai lama desapareció a mediados de la década de 1990 y un candidato respaldado por China fue aprobado para el cargo. El dalai lama, a quien el gobierno de Beijing considera un separatista peligroso, denunció la decisión y se ha negado a reconocer al actual panchen lama.
El gobierno de China afirma que el Tíbet ha formado parte de su territorio durante siglos, pero muchos tibetanos sostienen que fueron funcionalmente independientes durante la mayor parte de ese tiempo. El Ejército de Liberación del Pueblo de China invadió el territorio en 1950 y el dalai lama huyó a India nueve años después durante un levantamiento contra el dominio chino, visto como una erosión de la cultura budista única en la región.
Se registraron más de 500 réplicas después del sismo, que según el Servicio Geológico de Estados Unidos tuvo una magnitud de 7,1. El centro de terremotos de China registró una magnitud de 6.8.
El terremoto se registró a unos 75 kilómetros (50 millas) del monte Everest y de la frontera con Nepal, donde los temblores hicieron que la gente saliera corriendo de sus casas en la capital, Katmandú.
Entre las víctimas mortales están al menos 22 de los 222 residentes de Gurum, según informó el martes el jefe del Partido Comunista del pueblo, Tsering Phuntsog, a la agencia noticiosa oficial Xinhua. Los fallecidos incluían a su madre, de 74 años, y varios de sus familiares seguían enterrados entre los escombros.
“Ni siquiera los jóvenes pudieron salir de las casas cuando ocurrió el terremoto, mucho menos los ancianos y los niños”, afirmó Tsering Phuntsog.
Más de 3.600 casas se derrumbaron, de acuerdo con una encuesta preliminar, y 30.000 residentes fueron reubicados, reportó Xinhua, citando al gobierno de la ciudad en Shigatse, que en chino se llama Xigaze.
El Ministerio de Gestión de Emergencias tiene 1.850 rescatistas en la zona, indicó la televisora estatal CCTV, demás de bomberos y otros.
El Tíbet suele estar cerrado a la prensa extranjera debido a los reportes de malos tratos a la población nativa por parte de las autoridades chinas.
El presidente de China, Xi Jinping, ordenó “todos los esfuerzos de rescate posibles para salvar vidas y minimizar las víctimas”, informó Xinhua. También se han recuperado las comunicaciones en la zona, lo que permite una entrega más fluida de la ayuda de emergencia, agregó.
En Dharamsala, la ciudad india donde viven el dalai lama y una gran población tibetana, había una vigilia prevista para la noche del miércoles. Un aviso en la web del dalai lama dijo que presidirá una oración en memoria de las víctimas el jueves.
Preguntado por ese acto, el vocero del Ministerio de Exteriores de China, Guo Jiakun, dijo que “Tenemos muy clara la naturaleza separatista y los planes políticos del dalai lama y estamos vigilantes”.
Guo expresó su confianza en que los residentes en la zona afectada podrán recuperarse bajo “el fuerte liderazgo” del Partido Comunista.
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Bodeen informó desde Taipéi, Taiwán.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.