DEIR AL BALAH, Gaza (AP) — El ejército israelí arrestó al director de uno de los últimos hospitales que siguen funcionando en el norte de la Franja Gaza durante los ataques nocturnos en el enclave que mataron a nueve personas, entre las que había menores, según el personal médico palestino. El ejército israelí alegó que militantes de Hamás utilizaban la instalación y dijo que más de 240 personas fueron detenidas.
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El Ministerio de Salud de Gaza dijo el sábado que el doctor Hussam Abu Safiya, director del hospital Kamal Adwan, fue detenido el viernes junto a decenas de otros empleados y trasladado a un centro de interrogación. El ministerio indicó que las tropas israelíes irrumpieron en el hospital y obligaron a muchos empleados y pacientes a salir y a desnudarse en pleno invierno.
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El ejército israelí confirmó el sábado que detuvo al director del hospital para interrogarlo y lo señaló de ser un presunto integrante de Hamás, aunque no proporcionó pruebas. Afirmó que había cercado el hospital y que las fuerzas especiales ingresaron y encontraron armas en la zona. Señaló que los combatientes le dispararon a las fuerzas israelíes y que fueron “eliminados”. Un vocero militar israelí, el teniente coronel Nadav Shoshani, les dijo posteriormente a los periodistas que la mayoría de los detenidos son integrantes de Hamás.
El viernes, el ejército negó haber ingresado al hospital ni haberlo incendiado pero reconoció que había ordenado a las personas a salir. El ejército reiteró los señalamientos de que integrantes de Hamás operan dentro del hospital Kamal Adwan, pero los responsables del centro niegan la acusación.
El hospital Kamal Adwan ha sido atacado múltiples veces en los últimos tres meses por tropas israelíes que libran una ofensiva contra los efectivos de Hamás en los barrios circundantes. De acuerdo con el Ministerio de Salud de Gaza, un ataque al hospital a principios de semana mató a cinco de sus trabajadores sanitarios.
MedGlobal, la organización humanitaria para la cual trabaja Abu Safiya, dijo el viernes que estaban muy preocupados por él. El incidente sigue a la detención en octubre de otros cinco de sus trabajadores, agregó la organización, que calificó la situación como un “patrón alarmante y atroz de ataque al personal y espacios médicos”.
La campaña de bombardeos y ofensivas terrestres iniciada hace casi 15 meses por Israel ha devastado el sector sanitario gazatí. La Organización Mundial de la Salud ha dicho que el asalto al hospital Kamal Adwan ha dejado al último gran centro de salud del norte de Gaza “fuera de servicio” tras crecientes restricciones de acceso, añadiendo que “este horror debe terminar y la atención médica debe ser protegida”.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo que las condiciones para los pacientes de Kamal Adwan que fueron trasladados al cercano Hospital Indonesio, el cual también ha sido allanado en el pasado, eran “extremadamente difíciles”.
El comunicado militar israelí del sábado dijo que 350 pacientes junto con personal médico habían sido evacuados del hospital Kamal Adwan en las últimas semanas, y otros 95 pacientes, cuidadores y personal médico fueron evacuados al Hospital Indonesio durante la operación. También dijo que había proporcionado combustible y suministros médicos a ambos hospitales.
La guerra se ha cobrado la vida de más de 45.400 palestinos, más de la mitad de ellos mujeres y niños, y ha dejado más de 108.000 heridos, según el Ministerio de Salud de Gaza. Su recuento no distingue entre víctimas civiles y combatientes.
Desde octubre, la ofensiva israelí ha aislado prácticamente las zonas de Jabaliya, Beit Hanoun y Beit Lahiya, en el norte de la Franja de Gaza, y ha arrasado gran parte de ellas. Decenas de miles de palestinos se han visto obligados a abandonar sus hogares, pero se cree que miles permanecen en las inmediaciones del hospital Kamal Adwan y otros dos nosocomios.
Israel ha prometido destruir a Hamás después del ataque insurgente del 7 de octubre de 2023 en el sur de Israel en el que unas 1.200 personas murieron, y 250 más fueron tomadas como rehenes. Alrededor de 100 israelíes siguen cautivos en Gaza, pero se cree que un tercio de ellos estarían muertos.
Israel continuó el sábado con sus ataques en todo el enclave palestino. Una operación nocturna mató al menos a nueve personas en Maghazi, incluyendo mujeres y niños, según un reportero de The Associated Press que vio los cuerpos y el personal del hospital de los Mártires de Al Aqsa, a dónde fueron trasladados. Unos hombres lloraban junto a los cuerpos, envueltos en plástico blanco manchado de sangre, que yacían en el suelo de la morgue.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo el sábado que 48 personas habían sido asesinadas en las últimas 24 horas por fuego israelí.
Mientras tanto, Israel dijo que sus tropas habían comenzado a operar en la ciudad norteña de Beit Hanoun, citando informes de inteligencia que advertían de la presencia de combatientes e infraestructura de Hamás en la zona.
Los ataques a Israel también continuaron. En la madrugada del sábado, las sirenas de antiaéreas volvieron a despertar a la población y el ejército israelí dijo que interceptó un misil disparado por los rebeldes hutíes de Yemen.
Los aviones de guerra israelíes volvieron a bombardear infraestructura clave en Yemen el jueves. Los rebeldes, que cuentan con el respaldo de Irán, también han estado atacando a los barcos que navegan en el Mar Rojo y aseguran que no se detendrán hasta que Israel acepte un alto al fuego en Gaza.
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Mednick informó en Jerusalén.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de la AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
