MACAO (AP) — El presidente chino Xi Jinping instó al centro de casinos de Macao a diversificar su economía mientras juramentaba al nuevo gobierno de la antigua colonia portuguesa el viernes, en un evento que marcó el 25º aniversario de su traspaso a China.
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El nuevo jefe ejecutivo, Sam Hou Fai —el primer líder de Macao nacido en la China continental— prometió abordar el desarrollo económico desequilibrado y descoordinado del territorio.
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Desde su traspaso en 1999, la ciudad de 687.000 habitantes ha evolucionado de un enclave de juego monopolizado a convertirse en el centro de juegos más grande del mundo, atrayendo hordas de turistas de la China continental. El auge de los casinos ha mejorado los estándares de vida, pero las autoridades están preocupadas de que la economía de la ciudad semiautónoma dependa de manera poco saludable de la industria.
Algunos jóvenes dicen que la economía dominada por el turismo ha limitado sus opciones de carrera y el desarrollo diversificado de la ciudad. Los críticos afirman que años de dinero fácil de los turistas han desalentado a las empresas locales de innovar y mejorar, con muchos residentes dependiendo de conexiones personales para resolver problemas en lugar de la participación cívica.
Durante una cena de gala el jueves, Xi elogió el progreso de Macao en la diversificación económica durante los últimos cinco años y su influencia internacional fortalecida. Llamó a la ciudad a expandir su rol internacional mientras atrae talento global para construir un Macao mejor.
El viernes, dijo que la ciudad debería mejorar su planificación del desarrollo industrial, fortalecer el apoyo político e impulsar la inversión para nutrir nuevas industrias competitivas internacionalmente, en lo que los observadores dijeron fueron comentarios más fuertes y específicos que antes.
“El gobierno de la región administrativa especial y todos los sectores de la sociedad deben mostrar más cuidado hacia los jóvenes y crear un mejor ambiente y condiciones para su crecimiento, desarrollo de talento y cumplimiento de sus aspiraciones”, dijo.
Sam ha prometido acelerar los planes para impulsar el turismo y otros sectores como la medicina china, finanzas, tecnología, exposiciones y comercio.
Aunque el activismo político nunca ha desafiado seriamente a Beijing en Macao, las autoridades han reforzado el control en los últimos años, particularmente después de que Hong Kong fue sacudido por meses de enormes protestas antigubernamentales en 2019.
El disenso político ha sido en gran parte silenciado. Una vigilia conmemorando la represión militar de China en las protestas prodemocracia de la Plaza de Tiananmen en 1989 fue prohibida, y figuras prodemocracia fueron excluidas de competir en las elecciones legislativas. El año pasado, la ciudad endureció su ley de seguridad nacional.
Xi dijo que “la soberanía nacional, la seguridad y los intereses de desarrollo están por encima de todo”, al tiempo que señaló la necesidad de salvaguardar la autonomía de la ciudad. Dijo que la seguridad es una precondición para el desarrollo y que los residentes deberían valorar su estabilidad y paz duramente ganadas.
Al igual que Hong Kong vecino, Macao se gobierna por separado del resto de China bajo un sistema que le permite mantener elementos de sistemas económicos y sociales al estilo occidental. Es la única ciudad china donde el juego de casino es legal.
Con la agenda política de Beijing ahora dominando el desarrollo de Macao, el centro de casinos está profundizando los vínculos económicos y la integración social con la provincia vecina de Guangdong.
China ha designado una zona especial en la Isla Hengqin en la ciudad vecina de Zhuhai, administrada conjuntamente por Guangdong y Macao, para ayudar a fomentar nuevas industrias. Se planea que esa zona tenga alrededor de 120.000 residentes de Macao para 2035.
Xi dijo que Macao debe participar proactivamente en la iniciativa del Área de la Gran Bahía, con la que Beijing pretende vincular a Macao, Hong Kong y otras nueve ciudades de Guangdong en una potencia económica.
Xi concluyó su viaje de tres días en Macao el viernes. Durante su estancia, visitó una universidad y la zona especial en la Isla Hengqin, y asistió a un opulente evento cultural. También se reunió con los antiguos líderes de la ciudad de Macao y el jefe ejecutivo de Hong Kong, entre otros.
Tras despedir a Xi en el aeropuerto, Sam declaró a los periodistas que se comprometía a afrontar los retos con firmeza y a ser enérgico en la acción, afirmando que su gobierno sería limpio, práctico y cercano a su pueblo.
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Leung informó desde Hong Kong.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.