Micah Parsons dice que no necesita ser el jugador defensivo mejor pagado de la NFL, y la estrella de los Cowboys de Dallas no espera un contrato que promedie 40 millones de dólares por temporada.
PUBLICIDAD
El jugador que está en su cuarto año quisiera tener un acuerdo antes de que comience la temporada baja en primavera, pero también dijo que no tiene la intención de ausentarse del equipo si se alarga la negociación.
PUBLICIDAD
Parsons va a entrar al quinto y último año de su contrato de novato. Esa es la misma situación en la que se encontró el receptor All-Pro CeeDee Lamb, cuando se mantuvo alejado del equipo durante toda la temporada baja y el campamento de entrenamiento antes de firmar una extensión de contrato por 136 millones de dólares y cuatro años a finales de agosto.
Podría haber una gran diferencia entre las situaciones de Parsons y Lamb.
El receptor de Dallas tenía el mismo entrenador y sistema ofensivo en su lugar. Ahora, el contrato de Mike McCarthy está por expirar, al igual que el del coordinador defensivo de primer año, Mike Zimmer.
Los Cowboys (6-8), que juegan contra Tampa Bay (8-6), líder del Sur de la NFC, en casa el domingo por la noche, están cerca de la eliminación después de alcanzar los playoffs en cada una de las últimas tres temporadas.
Parsons se perdió cuatro partidos por un esguince alto de tobillo, y la temporada probablemente terminará con al menos cuatro titulares en la reserva de lesionados.
“No sé cómo será el staff de entrenadores”, dijo Parsons. “Me encantaría que Zimmer regresara. Lo he dicho públicamente de manera consistente, lo que ha hecho por este equipo, a pesar de las lesiones y todo. Ha hecho un trabajo tremendo para mí. Si cambian... Tengo que aprender un nuevo esquema. Tengo que estar con los chicos”.
Parsons no se compromete con el dinero porque cree que ha demostrado el impacto que puede tener. Incluso con la primera ausencia por lesión de su carrera, Parsons está a 1 1/2 capturas de alcanzar doble dígito en cada una de sus primeras cuatro temporadas.
Los otros cuatro jugadores que lo han hecho están en el Salón de la Fama.
“Creo que soy el mejor jugador del mundo”, dijo Parsons, quien tiene 49 capturas. “No lanzo números así como así. Veré lo que están dispuestos a darme”.
Parsons tiene 7 1/2 capturas en seis partidos desde que regresó de la lesión, pero no cree que terminar fuerte tenga influya mucho en lo que suceda con las negociaciones contractuales después de la temporada.
“Pienso que soy un creador de diferencias, y probablemente seré tratado como tal”, dijo Parsons. “No creo que en las próximas tres semanas vaya a ganar 20 millones de dólares. Creo que estoy bastante limitado”.
Y el límite salarial estará en la mente de Parsons mientras reflexiona sobre lo que promete ser un gran día de pago.
Nick Bosa, de San Francisco, tiene el valor anual promedio más alto para un jugador defensivo con 34 millones de dólares. Firmó una extensión de 170 millones de dólares por cinco años el año pasado.
“Sería bueno estar rodeado de buenos jugadores. Jugadores que me ayudarán a ganar campeonatos”, dijo Parsons. “Para mí, tener 40 millones de dólares y ser bloqueado en cada jugada y deslizado entre 3-4 personas, eso no suena muy divertido para mí. Se trata de mantener a personas que puedan hacer la diferencia. Veremos cómo se desarrolla, pero quiero mantener a tantos compañeros como sea posible”.
___
Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
