La cantidad de estadounidenses que solicitaron prestaciones por desempleo disminuyó notablemente la semana pasada tras el gran aumento de la semana anterior.
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Las solicitudes de prestaciones por desempleo se redujeron en 22.000 hasta alcanzar 220.000 en la semana del 14 de diciembre, informó el jueves el Departamento de Trabajo. Esta cifra es menor que las 229,000 pronosticadas por los analistas.
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Los cobros continuos de prestaciones, que conforman el número total de estadounidenses que reciben prestaciones por desempleo, cayeron en 5.000, llegando a 1,87 millones en la semana del 7 de diciembre. Eso también fue menos de lo que los analistas habían proyectado.
El promedio de cuatro semanas de solicitudes semanales, que suaviza parte de la volatilidad de una semana a otra, aumentó en 1.250 hasta alcanzar 225.500.
Las solicitudes semanales de beneficios por desempleo se consideran representativas de los despidos en Estados Unidos.
Aunque el mercado laboral ha mostrado cierta debilidad recientemente, sigue siendo saludable en gran medida y ha resistido mejor de lo que muchos expertos pronosticaron, considerando que las tasas de interés se han mantenido altas durante años. La Reserva Federal instituyó una serie de aumentos de tasas en 2022 y 2023 para intentar suprimir la inflación más alta en cuatro décadas que surgió mientras la economía de Estados Unidos se recuperaba de la breve pero aguda recesión pandémica.
La Fed redujo su tasa de referencia nuevamente el miércoles —su tercer recorte consecutivo— en respuesta a una inflación que ha disminuido en general, aunque ha sido difícil llegar al objetivo de 2% del banco central estadounidense.
La mayor sorpresa, que generó una enorme ola de ventas en Wall Street el miércoles, fue que la Fed proyectó solo dos recortes de tasas para 2025, frente a los cuatro anteriores.
A principios de este mes, el gobierno informó que las ofertas de empleo en Estados Unidos se recuperaron, alcanzando 7,7 millones en octubre en comparación con 7,4 millones en septiembre, un mínimo de 3 años y medio, lo cual indica que las empresas aún buscan trabajadores, aunque la contratación se haya enfriado.
En noviembre, los empleadores en Estados Unidos añadieron 227.000 empleos, después de agregar solo 36.000 en octubre, cuando los efectos de huelgas y huracanes redujeron considerablemente las nóminas de los empleadores. El gobierno también revisó al alza su estimación de crecimiento del empleo en septiembre y octubre en un total combinado de 56.000.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.