MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
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El Ministerio de Salud Pública de Líbano ha informado este jueves de que los ataques del Ejército de Israel en el marco de su ofensiva contra el partido-milicia chií Hezbolá, para la cual se firmó un alto el fuego el pasado martes, han dejado hasta la fecha un balance de casi 4.000 muertos y más de 16.500 heridos.
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En concreto, las autoridades libanesas han señalado que la cifra de fallecidos es de 3.961, de los cuales 78 fallecieron por los ataques del martes, jornada en la que el Ejército de Israel intensificó su ofensiva poco antes de que se hiciera oficial el acuerdo para un alto el fuego, que entró en vigor la madruga del miércoles.
Gran parte de las víctimas corresponden a la gobernación de Baalbek-Hermel, donde los ataques israelíes dejaron 28 muertos y 75 heridos. En Beirut se lamentaron 18 muertes y 67 heridos, cifras similares a las de la gobernación Sur; mientras que en la Becá hubo ocho muertos y 18 heridos; dos muertos y tres heridos en Akkar, un muerto y once heridos en Monte Líbano y otro muerto y tres heridos en la gobernación Norte.
El Ministerio de Salud libanés ha precisado que las cifras totales de víctimas se han ajustado debido a que en las últimas horas ha sido posible la retirada de escombros de algunos edificios atacados por Israel. Asimismo, desde Beirut han destacado que este balance puede seguir aumentado por este motivo a pesar de que Israel no lleve a cabo nuevos ataques.
Según estos datos, cerca de 2.680 hombres han fallecido por los ataques del Ejército de Israel, así como casi 740 mujeres y 250 menores. La elevada cifra de heridos se debe principalmente a la explosión de dispositivos de comunicación atribuidos a Hezbolá el pasado mes de septiembre, poco antes de que Israel redoblara su ofensiva contra el grupo islamista.
Asimismo, entre el personal sanitario se ha lamentado el fallecimiento de 222 personas, mientras que otros 330 profesionales han resultado heridos. Los ataques israelíes han alcanzado más de 130 instalaciones del sistema sanitario de Líbano, según datos del Ministerio de Salud Pública.
Israel y Hezbolá llegaron el martes a un acuerdo para un alto el fuego de unos 60 días y que estipula que tanto Hezbolá como las tropas israelíes deberán abandonar el sur del territorio libanés en favor del Ejército regular de Líbano, que deberá tomar posiciones en la zona para garantizar la seguridad del norte de Israel.
El repunte de las hostilidades en Beirut y el sur de Líbano se enmarca en los enfrentamientos iniciados hace más de un año después de que Hezbolá atacara Israel un día después de la ofensiva del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre de 2023, que dejó casi 1.200 muertos y 240 rehenes y sirvió como detonante para la actual guerra en Oriente Próximo.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) desataron el pasado 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras semanas de intensos bombardeos y ataques contra el país, incluida la explosión coordinada de miles de 'buscas' y 'walkie-talkies' vinculados a Hezbolá. Los ataques sobre Líbano han diezmado a Hezbolá, que ha perdido a su histórico líder, Hasán Nasralá.
