MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
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La Iglesia católica española, a través de sus oficinas para la protección al menor, ha dado formación en prevención de abusos a 400.000 personas, 280.000 de ellas menores --en colegios, para que sepan identificar los abusos--, en los dos últimos años, entre 2022 y 2023.
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"Son 400.000 personas que han recibido ya formación para la prevención en las diócesis y en el ámbito de la vida consagrada y esto se ha hecho en los dos últimos años y de ellos eran menores unos 280.000", ha explicado el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Francisco César García Magán.
Así lo ha indicado este viernes en la rueda de prensa posterior a la 126 Asamblea Plenaria de la CEE, que ha reunido esta semana en Madrid a todos los obispos de España.
Durante la reunión, según ha explicado, el servicio de coordinación y asesoramiento a las Oficinas de protección al menor ha informado a los obispos sobre el trabajo que realizan en la actualidad en áreas como la formación, el asesoramiento al trabajo puntual de las oficinas y la asistencia jurídica.
Por otro lado, preguntado por el fondo de compensación que plantea el Defensor del Pueblo en su informe, que presentó este jueves ante el Pleno del Congreso de los Diputados, García Magán ha asegurado que "ya se están haciendo todas las indemnizaciones" y que en "los casos que van por vía judicial sea civil sea canónica", le "consta que hay diócesis y hay instituciones e institutos de vida consagrada que ya han pagado y han dado lo que ha determinado el juez".
Además, ha destacado que desde la Iglesia han abierto "otra vía" para aquellos casos "que no tienen un recorrido judicial o bien sin sentencia judicial", en los que se ha llegado a "un acuerdo extrajudicial", para hacer una "reparación integral" a las víctimas.
"Es decir, queremos hacer un tratamiento personalizado a lo que cada víctima demande y quien quiera un acompañamiento psicológico ofrecérselo, quien necesite un tratamiento médico psiquiátrico, ofrecérselo, quien quiera también, respetando la libertad de cada uno, un acompañamiento espiritual lo tendrá y, por supuesto, quien quiera esa reparación económica también la tendrá", ha subrayado.
De esta forma, según ha afirmado, en los casos que no pueden seguir por la vía judicial, bien porque ha habido una prescripción civil o bien porque el victimario ha muerto, "entonces ahí se garantiza esa reparación, esa indemnización".
En concreto, ha puntualizado que la compensación económica correría a cargo de "la diócesis la que pertenecía" el agresor o del "instituto religioso al que pertenecía" y se garantiza que, "en caso de que la diócesis o el instituto religioso no pudiera hacer frente a esas reparaciones, como segunda instancia, estaría la Conferencia Episcopal o la Conferencia Española de Religiosos (CONFER). "O sea que hay, si me permiten ustedes la expresión, una doble garantía de que eso se da", ha insistido.
