La misión apunta a que los cohetes fueron "probablemente disparados" por Hezbolá o grupos afiliados
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Meloni muestra su "profunda indignación y preocupación" por el "inaceptable" ataque y pide a Israel y Hezbolá que "colaboren para identificar" a los responsables
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MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Al menos cuatro 'cascos azules' de nacionalidad italiana de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) han resultado heridos este viernes a causa del impacto de dos proyectiles en el interior de una base de la misión en la localidad libanesa de Shama, situada en el sur del país.
Un portavoz de la FINUL ha indicado en declaraciones concedidas a Europa Press que en el cuartel general de la misión en la zona occidental han impactado dos cohetes de 122 milímetros, tras lo que la misión ha especificado que todos los heridos están recibiendo ya tratamiento y que ninguno se encuentra en peligro de muerte.
"Los cohetes, probablemente disparados por Hezbolá o grupos afiliados, impactaron en un búnker y una zona logística usada por la Policía Militar internacional, causando daños significativos en infraestructuras cercanas", ha manifestado, antes de especificar que una de las estructuras ha sufrido un incendio, ya extinguido.
En este sentido, ha recordado que es el tercer ataque contra la base en Shama en una semana y ha detallado que este último incidente tiene lugar "en medio de un intenso intercambio de artillería y enfrentamientos terrestres durante los últimos días en Shama y Naqura", una muestra del aumento de las tensiones en la región.
La FINUL ha reclamado por ello a las partes en conflicto que "eviten los combates" cerca de sus posiciones y ha reseñado que "la inviolabilidad de las instalaciones y el personal de la ONU debe ser respetada en todo momento". "Cualquier ataque contra las tropas de pacificación supone una grave violación del Derecho Internacional y de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad", ha dicho.
"Todo ataque deliberado o accidental contra las tropas de pacificación desplegadas en el sur de Líbano debe cesar inmediatamente para garantizar la seguridad y el respeto del Derecho Internacional", ha zanjado la misión tras el suceso, condenado inmediatamente por la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, quien ha mostrado su "profunda indignación y preocupación" por lo sucedido.
"Quisiera expresar mi solidaridad y mi cercanía, así como la del Gobierno, a los heridos y a sus familiares", ha apuntado Meloni en un comunicado en su cuenta en la red social X, donde ha mostrado además su "sincero agradecimiento" a las tropas de pacificación "por la actividad llevada a cabo diariamente por todo el contingente italiano en Líbano".
"Reitero una vez más que estos ataques son inaceptables y renuevo mi llamamiento a las partes sobre el terreno para que garanticen en todo momento la seguridad de los soldados de la FINUL y colaboren para identificar rápidamente a los responsables", ha señalado.
Por su parte, el vicepresidente del Gobierno italiano y ministro de Exteriores, Antonio Tajani, ha apuntado como responsable al partido-milicia chií Hezbolá, que por ahora no se ha pronunciado sobre el incidente, según ha recogido el diario italiano 'La Repubblica'.
"Una vez más, lo que está sucediendo es inaceptable y así como le dijimos a Israel que preste la máxima atención, le decimos con la misma firmeza a Hezbolá que el Ejército italiano no puede ser tocado", ha subrayado Tajani. "Si piensan seguir causando daño a las bases italianas, se han equivocado", ha recalcado.
El suceso tiene lugar apenas tres días después de que cuatro 'cascos azules' ghaneses de la FINUL resultaran heridos por el impacto de un proyectil posiblemente lanzado por Hezbolá impactara en una de sus bases. Además, otros cinco proyectiles impactaron en la citada base militar en Shama, incidente que se saldó sin víctimas.
De esta forma, es la tercera vez en cerca de una semana que esta base de la FINUL, bajo control del contingente italiano, recibe impactos directos en el marco de las hostilidades en la región. Ya el pasado 15 de noviembre las instalaciones fueron alcanzadas por un proyectil de artillería de 155 milímetros.
Israel desató el 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras varias semanas de intensos bombardeos y ataques contra el país, incluida la explosión coordinada de miles de dispositivos de comunicación utilizados por el grupo libanés, después de más de once meses de combates con Hezbolá en la zona fronteriza. Líbano ha denunciado más de 3.500 muertos desde el estallido de las hostilidades el 8 de octubre de 2023.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos iniciados hace más de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza, donde han muerto ya más de 44.000 personas.
