WASHINGTON (AP) — La economía mundial, sacudida por conflictos y unas crecientes rivalidades geopolíticas, corre el riesgo de meterse en un estancamiento de crecimiento lento y elevado endeudamiento, advirtió el jueves la directora del Fondo Monetario Internacional. También instó a los dirigentes chinos a tomar medidas más decisivas para reactivar la lenta economía de su país o correr el riesgo de ver caer en picado el crecimiento económico.
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“Estos son momentos de ansiedad”, dijo la directora general del FMI, Kristalina Georgieva, a los reporteros durante las reuniones otoñales del fondo y su agencia hermana, el Banco Mundial.
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El FMI prevé que la economía mundial se expandirá este año a un ritmo que Georgieva calificó de un “anémico” 3,2%.
El comercio mundial es mediocre en un momento de conflicto y creciente tensión geopolítica, incluidas las frías relaciones entre las dos mayores economías del mundo, Estados Unidos y China. “El comercio ya no es un potente motor de crecimiento”, dijo. “Vivimos en una economía global más fragmentada”.
Al mismo tiempo, muchos países están luchando con las deudas que contrajeron para combatir la pandemia de COVID-19. El FMI prevé que la deuda pública mundial supere los 100 billones de dólares este año. Esto equivaldría al 93% de la producción económica mundial, una proporción que se espera que se acerque al 100% en 2030.
“La economía mundial corre el riesgo de estancarse en una senda de bajo crecimiento y elevado endeudamiento”, afirmó Georgieva. “Eso significa menos ingresos y menos puestos de trabajo”
Aun así, el telón de fondo económico no es del todo sombrío.
El FMI afirma que el mundo ha hecho progresos considerables para frenar la inflación que se disparó en 2021 y 2022, cuando las economías se recuperaron con una fuerza inesperada de los bloqueos pandémicos. Lo atribuye a la subida de las tasas de interés impulsada por la Reserva Federal y otros bancos centrales y a la reducción de los retrasos en fábricas, puertos y almacenes de carga que habían provocado escasez, retrasos y subida de precios.
En los países ricos, el FMI prevé que la inflación descienda el año próximo hasta el 2% que persiguen los bancos centrales. Y las presiones sobre los precios han disminuido sin provocar una recesión mundial. "En la mayor parte del mundo se vislumbra un aterrizaje suave", dijo Georgieva.
Pero mucha gente sigue luchando contra los precios altos y la incertidumbre económica. Los líderes mundiales le dicen que sus economías están relativamente sanas, pero la gente corriente “no se siente bien con sus perspectivas económicas”.
El FMI, una organización de 190 países, trabaja para fomentar el crecimiento económico y la estabilidad financiera y reducir la pobreza en el mundo.
