PAFOS, Chipre (AP) — Los líderes de nueve países del sur de la Unión Europea se comprometieron el viernes a apoyar a las fuerzas armadas de Líbano a afianzar su control del sur del país, con la esperanza de lograr la paz en un área plagada de combates entre Israel y Hezbollah.
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En una declaración conjunta, los líderes del autodenominado MED9 —conformado por Italia, España, Francia, Grecia, Malta, Chipre, Eslovenia, Portugal y Croacia— dijeron que “seguirían abogando por un mayor apoyo a Líbano y a su pueblo, incluidas las Fuerzas Armadas libanesas, que están llamadas a desempeñar una importante función estabilizadora”.
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“La situación que se desarrolla en Oriente Medio es gravemente alarmante”, se lee en la declaración. “A la luz de las repercusiones del conflicto en Gaza en toda la región, expresamos nuestra extrema preocupación por la escalada de la confrontación militar entre Israel y Hezbollah”.
El presidente francés Emmanuel Macron dijo en una conferencia de prensa que el regreso de las Fuerzas Armadas libanesas al sur de Líbano y la restauración de la soberanía libanesa “son esenciales para su paz y su estabilidad”.
Macron no especificó la forma que adquirirá ese apoyo, pero dijo que una conferencia que se realizará el 24 de octubre en la capital francesa tendrá como objetivo aumentar las entregas de ayuda a Líbano mientras se cierne una crisis humanitaria, al tiempo que se contribuye a reforzar al ejército y las fuerzas internas del país.
En preparación para esa conferencia, Macron y la primera ministra italiana Giorgia Meloni dijeron que una reunión de los ministros de Defensa del G7 también buscará formas de ayudar al ejército libanés para avanzar hacia el sur.
El apoyo declarado de los líderes de la Unión Europea hacia las fuerzas armadas de Líbano se produce mientras el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, conversaba con sus homólogos de Arabia Saudí, Qatar y Francia sobre cómo la elección de un nuevo presidente libanés podría reducir las tensiones en Oriente Medio al hacer que Hezbollah desplace sus fuerzas lejos de la frontera norte de Israel.
Meloni y el primer ministro español Pedro Sánchez rechazaron, junto con Macron, lo que el presidente francés denominó el “ataque deliberado” a soldados pertenecientes a una fuerza de pacificación de la ONU (UNIFIL) en el sur de Líbano por parte de Israel. Francia, España e Italia aportaron tropas a la Fuerza Provisional de Naciones Unidas para el Líbano (UNIFIL).
