TEGUCIGALPA (AP) — El ministro de Seguridad de Honduras, Gustavo Sánchez, confirmó el viernes la captura del supuesto autor material y de un presunto cómplice del asesinato de un ambientalista que había acusado a una empresa minera de contaminar una zona protegida.
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“En un trabajo coordinado, hemos capturado al autor material de la muerte del ambientalista Juan López. Se detuvo también a un cómplice y se incautó la motocicleta que fue utilizada para realizar el hecho”, escribió Sánchez en su cuenta de X.
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“La investigación está respaldada por indicios técnicos y científicos”, agregó el funcionario, casi al mismo tiempo en que se realizaba el operativo de captura de los sospechosos.
El crimen del ambientalista se produjo la noche del 14 de septiembre en la ciudad de Tocoa, la más poblada del departamento de Colón, en el norte de Honduras, minutos después que López salió de la iglesia en dirección hacia su vivienda.
Su muerte generó un repudio generalizado a nivel nacional e internacional, incluso el papa Francisco se pronunció al respecto y lamentó el asesinato del ambientalista.
Una hora antes del arresto de los sospechosos, el fiscal general de Honduras, Johel Zelaya, escribió en su cuenta de X que ordenó la captura del autor material y del cómplice del crimen de López.
“Pueblo hondureño, como resultado de un arduo trabajo investigativo (...,) he ordenado la detención preventiva del presunto autor material y un supuesto cómplices que participaron en el asesinato del ambientalista Juan López”, apuntó.
López era un reconocido defensor del Parque Nacional Montaña de Botaderos “Carlos Escaleras”, una reserva natural localizada sobre tres departamentos de Honduras, Tocoa, Olancho y Yoro, en donde según el Comité de Defensa de Bienes Comunes y Públicos opera la minera Inversiones Los Pinares a pesar de que la zona es considerada una reserva natural.
Los ambientalistas han denunciado que esa empresa está destruyendo sus recursos pues la extracción de minerales de óxido de hierro y la instalación de una fábrica de procesamiento en la zona núcleo del parque contamina el río Guapinol, debido a las construcciones de carreteras alternas que realizan para llegar al área de explotación.
En 2023 se reportó en Tocoa el crimen de otros tres ambientalistas que se oponían a ese proyecto minero: en enero de ese año, fueron asesinados Ali Domínguez, de 38 años, y Jairo Bonilla, de 28. Cinco meses después, en junio, se produjo el asesinato de Oquelí Domínguez, hermano de Ali Domínguez.
Desde 2010, se registra la muerte de más de 150 defensores de derechos humanos y ambientalistas en Honduras.
En el 2016, la líder de la etnia lenca Berta Cáceres, murió a manos de criminales que llegaron a su casa y dispararon. Su crimen es considerado uno de los más emblemáticos de los últimos años.
