LOS ÁNGELES (AP) — La vicepresidenta Kamala Harris dará un mitin en Las Vegas el domingo por la noche, mientras tanto ella como el republicano Donald Trump siguen haciendo frecuentes viajes a Nevada, buscando ganar impulso en el estado indeciso a medida que se acerca el día de las elecciones.
El mitin forma parte de la última gira de Harris por la costa oeste del país, que incluye su primer viaje a la frontera entre Estados Unidos y México desde que sustituyó al presidente Joe Biden al frente de la candidatura presidencial demócrata. El viernes, la vicepresidenta caminó junto a un imponente muro fronterizo de color óxido y con alambre de púas en Douglas, Arizona, y se reunió con las autoridades federales.
El sábado asistió a una recaudación de fondos en San Francisco y tenía previsto un acto el domingo en Los Ángeles antes de dirigirse a Nevada, con un regreso a Washington previsto para el lunes por la noche.
“Esta contienda es lo más reñida posible”, dijo el sábado ante una multitud de donantes. “Esta es una contienda de margen de error”.
Harris dijo que, aunque hay entusiasmo, se presenta como candidata menos favorecida. E invitó a la gente a “unirse a nuestro equipo en los estados disputados” para ayudar a llevar a los votantes a las urnas, incluso si se trata de californianos haciendo llamadas desde casa.
El domingo, el exsenador por Arizona Jeff Flake se convirtió en el más reciente republicano destacado en apoyar a Harris y Walz. Les atribuyó un “buen carácter y amor al país” y dijo que quiere un presidente que no trate a los adversarios políticos como enemigos ni intente subvertir la voluntad de los votantes.
Flake, un viejo crítico del anterior presidente, se une a una lista de republicanos contrarios a Trump que han dicho que votarán a la candidatura demócrata, no sólo que se abstendrán de votar a Trump. Entre ellos está Dick Cheney, el exvicepresidente profundamente conservador, y su hija, Liz.
El domingo, el candidato al Senado por Maryland, Larry Hogan, exgobernador republicano y duro crítico de Trump, dijo que Harris aún tiene que ganarse su voto, aunque Trump no lo obtendrá.
En Nevada, todos los votantes reciben automáticamente las papeletas por correo a menos que opten por no hacerlo, un cambio de la era de la pandemia que se estableció en la ley estatal. Eso significa que la mayoría de las papeletas podrían empezar a salir en cuestión de semanas, mucho antes de la jornada electoral del 5 de noviembre.