CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Las promesas de un trabajo seguro sin importar los resultados se esfumaron en menos de un mes.
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Jaime Lozano quedó destituido como entrenador de la selección mexicana de fútbol un par de semanas después de la eliminación en la primera ronda de la Copa América, anunció el martes la federación de este país.
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La Federación Mexicana de Fútbol explicó que uno de los motivos para el cese fue que Lozano, de 45 años, nunca reforzó su cuerpo técnico con alguien más experimentado.
“Desde la llegada de Jaime Lozano se le pidió fortalecer su equipo sumando a alguien de más experiencia que viniera a complementar su talento y capacidad como estratega, en medio de un entorno sumamente retador”, indicó la Federación en un comunicado. “Sin embargo, un año después y por distintas razones, esto no se concretó”.
Además, los dirigentes informaron que se le ofreció seguir en el cargo como asistente de un entrenador más experimentado y después continuar con el proceso él solo hasta el 2030.
“Mi salida es una decisión personal por una cuestión de valores y una diferencia en el rumbo del proyecto acordado”, escribió Lozano en sus cuentas oficiales de redes sociales. “Me voy con la cabeza en alto, con experiencias únicas y con aprendizajes enormes”.
El órgano rector del fútbol mexicano no informó quién es el entrenador más experimentado que tomará el cargo, pero diversos medios apuntan a Javier Aguirre como el favorito. El “Vasco” Aguirre dirigió ya a México en dos ocasiones anteriores y disputó la final de la última edición de la Copa del Rey, al frente del Mallorca.
Los dirigentes anunciaron que será en la primera semana de agosto cuando presenten un nuevo plan de trabaio, que podría incluir ya el nombre del próximo entrenador.
Quien sea que llegue al banquillo, se convertirá en el tercer entrenador en 19 meses que han transcurrido desde que México quedó eliminado en la primera ronda del Mundial de Qatar 2022, la primera vez que eso le ocurre al Tri desde Argentina 78.
Lozano estuvo al frente de México por poco más de un año, en el que dirigió 21 partidos, de los cuales ganó 10 y perdió siete.
Su porcentaje de efectividad de 53,7 por ciento es el más bajo para un seleccionador con al menos 20 partidos desde el sueco Sven Goran Eriksson, quien fue despedido en 2009 luego de un año en el puesto con 48,72.
Lozano ganó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y fue nombrado al cargo como interino en mayo del año pasado para sustituir al argentino Diego Cocca, destituido luego de siete partidos.
Después de ganar la Copa Oro y con el apoyo manifiesto de los jugadores, los dirigentes le dieron el puesto definitivo, pero el equipo fue a menos con el pasar de las semanas incluyendo malas actuaciones en la Liga de Naciones donde apenas pudo superar a Honduras en penales en el estadio Azteca y luego perdió la final ante Estados Unidos.
Para la Copa América, Lozano decidió dejar fuera a cinco jugadores experimentados entre ellos el portero Guillermo Ochoa y el delantero Hirving Lozano. El equipo sólo fue capaz de superar a Jamaica, antes de caer con Venezuela y empatar ante Ecuador.
El presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, Ivar Sisniega, dijo que respaldaba esa decisión y que el puesto de Lozano estaba seguro hasta el Mundial del 2026, del que México será coanfitrión junto con Estados Unidos y Canadá, sin importar los resultados que se dieran sobre el campo.
No cumplió la promesa.
