WASHINGTON (AP) — Se espera que aproximadamente 100.000 inmigrantes que llegaron a Estados Unidos siendo niños se inscriban en el seguro médico de la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible (PPACA, por sus siglas en inglés) el próximo año según una nueva directiva que el gobierno del presidente Joe Biden dio a conocer el viernes.
La medida tardó más de lo prometido en concretarse y no cumplió con la propuesta inicial de Biden de permitir que esos inmigrantes se inscribieran en Medicaid, el programa de seguro médico que brinda cobertura casi gratuita a las personas más pobres del país.
Pero permitirá que miles de personas, conocidas como “dreamers”, accedan a exenciones fiscales cuando se inscriban para obtener cobertura una vez que se abra la inscripción en el mercado de la Ley de Cuidado de Salud Asequible el 1 de noviembre, pocos días antes de las elecciones presidenciales.
“Estoy orgulloso de las aportaciones de los ‘dreamers’ a nuestro país y me comprometo a darles el apoyo que requieren para tener éxito”, dijo Biden el viernes en un comunicado.
Si bien la medida puede ayudar a Biden a mejorar su posición en un momento crucial entre los latinos, un importante bloque electoral que Biden necesita para ganar las elecciones, seguramente provocará más críticas entre los conservadores sobre las políticas fronterizas y migratorias del presidente.
La decisión abre el mercado de seguros a cualquier participante en el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) del gobierno de Barack Obama, muchos de los cuales son latinos.
Xavier Becerra, el principal funcionario de salud del país, dijo el jueves que muchos de esos migrantes han retrasado el recibir atención médica porque no han tenido cobertura.
“Incurren en costos y deudas más altos cuando finalmente reciben atención”, dijo Becerra a los periodistas en una llamada telefónica. “Hacer que los ´dreamers´ sean elegibles para inscribirse en la cobertura mejorará su salud y bienestar y fortalecerá la salud y el bienestar de nuestra nación y nuestra economía”.
La medida del gobierno federal cambia la definición de “presente legalmente” para que los participantes de DACA puedan inscribirse de forma legal en el mercado de intercambio.
El entonces presidente Barack Obama lanzó la iniciativa DACA para proteger de la deportación a los inmigrantes que llegaron sin autorización legal a Estados Unidos con sus padres cuando eran niños y para permitirles trabajar legalmente en el país. Sin embargo, los “dreamers” todavía no eran elegibles para programas de seguro médico subsidiados por el gobierno porque no cumplían con el requisito de tener una “presencia legal” en Estados Unidos.
El gobierno federal decidió no ampliar la elegibilidad para Medicaid para esos inmigrantes después de recibir más de 20.000 comentarios sobre la propuesta, indicaron funcionarios de alto nivel el jueves. Los funcionarios se negaron a explicar por qué la norma, que se propuso por primera vez en abril pasado, tardó tanto en concretarse. La demora significó que los inmigrantes no pudieran inscribirse en el mercado para obtener cobertura este año.
En un momento dado, hubo hasta 80.000 personas inscritas en DACA, aunque ahora la cifra ronda las 580.000. El gobierno prevé que sólo 100.000 se inscribirán porque algunas pueden obtener cobertura a través de su lugar de trabajo o de otras maneras. También es posible que algunas no puedan pagar la cobertura a través del mercado.
Otras clases de inmigrantes, entre ellos los solicitantes de asilo y personas con estatus de protección temporal, ya son elegibles para comprar seguros a través de los mercados de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, la ley de atención médica de Obama de 2010 a menudo llamada “Obamacare”.
El año pasado, el presidente reveló una norma cuya intención es eludir los desafíos legales al programa DACA; el expresidente Donald Trump actuó para poner fin a esa política, y ésta ha ido de un lado al otro en los tribunales federales. En otoño pasado, un juez federal dijo que la versión actual podía continuar, al menos de manera temporal.
“El presidente Biden y yo seguiremos haciendo todo lo que esté en nuestro poder para proteger el programa DACA, pero se trata solo de una solución temporal”, dijo la vicepresidenta Kamala Harris en un comunicado. “El Congreso debe actuar para garantizar que los ‘dreamers’ tengan las protecciones permanentes que merecen”.
Karoline Leavitt, vocera del equipo de campaña de Trump, criticó el viernes la decisión de permitir que los participantes de DACA tengan acceso a los mercados de atención a la salud, diciendo que el candidato presidencial republicano “sellaría la frontera, detendría la invasión y ampliaría las oportunidades económicas para los ciudadanos estadounidenses, y no para los extranjeros ilegales”.