MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Biden ha asegurado que la Administración había estado presionando a las compañías ferroviarias para que tomaran más precauciones antes del descarrilamiento Del 3 de febrero de 2023, por lo que lo ha considerado "un acto de crueldad cien por cien prevenible", ha informado la CNN.
"Las empresas ferroviarias multimillonarias que transportan sustancias químicas tóxicas tienen la responsabilidad de hacerlo de forma segura", ha relatado, agregando que Norfolk Southern "fracasó". "Si bien hay actos de Dios", ha explicado Biden, "este fue un acto de codicia".
El accidente no dejó ninguna víctima mortal, pero el descarrilamiento sumado a la decisión de ventilar y quemar cinco camiones cisterna que contenían cloruro de vinilo cancerígeno crearon una columna de humo tóxico que podía verse desde el espacio y provocaron el pánico sobre la calidad del agua potable del pueblo. Más de 500.000 kilos de toxinas fueron depositadas en el agua, el aire y el suelo de la ciudad como resultado de lo ocurrido.
A causa de esto, se ordenó la evacuación de cientos de residentes, teniendo que mudarse algunos de forma permanente. Mucha gente aseguró que había desarrollado sarpullidos, dolor de garganta, náuseas y dolores de cabeza trsa regresar a sus hogares y les preocupaba que los síntomas estuvieran relacionados con las sustancias químicas liberadas.
Biden había estado todo este tiempo bajo presión para visitar la ciudad, ya que la Casa Blanca dijo pocos días después del descarrilamiento que el presidente encontraría un momento para visitarla, pero no había sucedido hasta ahora.