MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
En la actualidad, el modelo de pensiones en España se trata de un reparto en el que los cotizantes pagan el subsidio de los jubilados a través de la caja única, independientemente de la comunidad autónoma en la que vivan.
Y el acuerdo entre el PSOE y el PNV para la investidura de Pedro Sánchez se compromete a la transferencia de la gestión de la Seguridad Social al País Vasco en un plazo máximo de dos años, lo que ha vuelto a sacar a la luz el debate sobre el déficit contributivo de las comunidades autónomas de la Seguridad Social.
Sin embargo, este traspaso a Euskadi no comprometerá la caja única de la Seguridad Social y las pensiones de los ciudadanos vascos se seguirán pagando con este modelo de solidaridad entre las diferentes comunidades autónomas.
Un informe de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) cree que el sistema de caja única favorece a los nacionalistas vascos dado el fuerte déficit que el susbistema contributivo de la Seguridad Social presenta en el País Vasco.
LOS DATOS DE LA ÚLTIMA DÉCADA
En cualquier caso, los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones arrojan que el País Vasco es una de las comunidades con mayor déficit de la Seguridad Social, ya que acumula un saldo negativo de 24.747,4 millones de euros en la última década.
En concreto, el Ministerio que dirige desde ahora la navarra Elma Saiz proporciona datos de ingresos y gastos de la Seguridad Social por comunidades autónomas desde el ejercicio de 2013.
Según estos datos, el País Vasco cerró el año 2022 con un balance negativo de hasta 3.100,3 millones de euros entre los ingresos por las cotizaciones y el gasto por las pensiones, que fue de 3.040,8 millones en el año 2021.
En cuanto a la evolución en la última década del déficit contributivo, destaca que el País Vasco tenía un balance negativo de 1.758,3 millones de euros en 2013, que pasó a 1.803,4 millones de euros al cierre de 2014 y aumentó al cierre de 2015 hasta situarse en los 2.076,4 millones de euros.
En 2016, el déficit del País Vasco subió hasta los 2.271,3 millones de euros, mientras que al cierre de 2017 se situó en los 2.337,4 millones de euros. Fue escalando progresivamente en el año 2018 hasta los 2.564 millones y en el año 2019 hasta los 5.677,6 millones de euros.
Y ya en el año 2020, el saldo negativo del País Vasco entre los ingresos por las cotizaciones y el gasto por las pensiones alcanzó los 3.117,4 millones de euros.