MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
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El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha denunciado este miércoles los "actos de represalia militar" por parte de Israel contra la Franja de Gaza y ha recalcado que la situación "es el resultado inexorable del bloqueo del horizonte político" para la resolución del conflicto palestino-israelí.
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El monarca marroquí ha indicado en un discurso con motivo del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino que este evento tiene lugar este año en medio de "una situación sin precedentes" por la "frenética escalada y los enfrentamientos armados a gran escala".
El Día Internacional en Solidaridad con el Pueblo Palestino se celebra el 29 de noviembre de cada año desde 1977 en conmemoración de la fecha en la que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó la resolución 181, que estipulaba la creación de un "Estado judío" y un "Estado árabe" en los territorios de Palestina, con Jerusalén como parte separada sometida a un régimen internacional especial.
Así, el rey de Marruecos ha lamentado que el conflicto ha dejado "miles muertos y heridos, la mayor parte mujeres y niños", así como "la destrucción masiva de viviendas, hospitales, escuelas, lugares de culto e infraestructuras", que se suman a "un bloqueo total a Gaza" que supone "una violación flagrante de las leyes internacionales y un desprecio total a los valores humanos".
"A pesar de los crecientes llamamientos a una necesaria reducción de las tensiones y una calma que permita la entrega de medicinas y otra ayuda humanitaria, Israel persistió en sus violentos bombardeos indiscriminados, sumados a la incursión de sus fuerzas terrestres en la Franja de Gaza, lo que ha causado el éxodo de más de un millón y medio de palestinos y mayores matanzas y destrucciones", ha apuntado.
Mohamed VI ha indicado que "el agravamiento de la catástrofe humanitaria en Gaza y los continuados ataques contra civiles suponen un llamamiento a la conciencia de la comunidad internacional, especialmente de las potencias con influencia, y del Consejo de Seguridad (de la ONU), en tanto que herramienta internacional responsable del mantenimiento de la seguridad, la estabilidad y la paz en el mundo".
En este sentido, ha abogado por "salir del estado de división y hablar con una sola voz para tomar una resolución decisiva y vinculante que imponga un alto el fuego inmediato y permanente, así como el respeto del Derecho Internacional y del Derecho Internacional Humanitario".
Por ello, ha recordado que durante la cumbre extraordinaria celebrada el 11 de noviembre en Arabia Saudí por países árabe e islámicos pidieron "reducir de forma urgente y tangible" las tensiones y el cese de la "agresión militar" para conseguir "un alto el fuego permanente", así como garantizar la protección de los civiles, permitir la entrega de ayuda en Gaza y establecer un horizonte político".
"Hemos subrayado en más de una ocasión que la solución a esta cuestión, en línea con las resoluciones de la legalidad internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad y sobre la base de la solución de los dos Estados, es la vía para establecer una paz justa y global y facilitar la seguridad y la vida digna para todos los pueblos de la región", ha dicho.
Asimismo, ha recalcado que la situación "es el resultado del aumento de las prácticas israelíes, extremistas y sistemáticas, así como de las medidas unilaterales y de las repetidas provocaciones en Jerusalén, que socavan cualquier esfuerzo por calmar la situación y frustran las iniciativas internacionales destinadas a poner fin a las distintas tensiones y a la espiral de violencia mortal".
"GRAVES VIOLACIONES"
El monarca marroquí ha denunciado además las "graves violaciones" cometidas por Israel en el marco de su ofensiva contra la Franja de Gaza y ha dicho que estos actos "contravienen las disposiciones del Derecho Internacional". "Queremos reafirmar nuestro rechazo a todas las violaciones y condenamos la política de castigo colectivo, los desplazamientos forzosos y el intento de imponer una nueva realidad (en Gaza)", ha argumentado.
"La Franja de Gaza forma parte indivisible de los territorios palestinos y del Estado palestino unificado", ha reseñado Mohamed VI, que ha destacado además que la ayuda humanitaria entregada por la comunidad internacional, incluido Rabat, debe llegar a Gaza "de forma segura, suficiente, sostenible y sin obstáculos".
De esta forma, ha incidido en que "a pesar de la sombría situación y de la ausencia de horizontes para un acuerdo en Oriente Próximo", Marruecos "sigue teniendo la esperanza de asistir a una conjugación de los esfuerzos de la comunidad internacional para reavivar el proceso de paz", según un comunicado publicado en la página web del Ministerio de Exteriores marroquí.
"Nuestra visión actual, tal y como siempre ha sido, sigue considerando la paz como una opción estratégica para los pueblos de la región, así como la única vía susceptible de garantizar la seguridad y la estabilidad a todos sus pueblos, resguardándolos de las espirales de la violencia y de las guerras", ha señalado.
"En este sentido, la clave para alcanzar la paz que anhelamos no es otra que la solución de los dos Estados, en tanto que solución realista consensuada por la comunidad internacional y cuya realización pasa por un proceso negociador", ha reiterado el rey de Marruecos, quien ha destacado la "postura inamovible" de Rabat en apoyo a "los legítimos derechos del hermano pueblo palestino".
El Gobierno de Israel y Hamás pactaron la semana pasada una tregua temporal de cuatro días que entró en vigor el viernes y que fue prorrogada el lunes. La misma llega hoy a su fin, salvo que las partes logren pactar otra extensión, en medio de las peticiones internacionales para un alto el fuego, opción rechazada por las autoridades israelíes.
Israel lanzó una ofensiva contra el enclave palestino tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. Las autoridades gazatíes, controladas por el grupo islamista, han cifrado en cerca de 15.000 los palestinos muertos, a los que se suman otros 230 a manos del Ejército israelí y por ataques de colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.