MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
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"Siendo el último Gran Premio del año siempre es especial, pero este es diferente. No me gusta decir que es mi último con Honda, porque nunca se sabe en el futuro, pero será el punto y aparte de una etapa con el Repsol Honda Team donde hemos conseguido muchos éxitos y será un fin de semana de muchas emociones", subrayó Márquez en una entrevista facilitada este jueves por su equipo.
El ocho veces campeón del mundo no olvida lo importante que ha sido la fábrica japonesa. "El Repsol Honda Team ha sido y siempre será el equipo de mi carrera deportiva y de mi vida. He estado 11 años con ellos, con seis títulos mundiales, y eso no voy a conseguirlo con otro equipo. Tengo 30 años y la carrera deportiva de cualquier deportista o piloto, en este caso, dura lo que dura y será el equipo con el que haya conseguido más éxitos a nivel personal y colectivo", remarcó.
"Todo el 'paddock' quiere ser piloto del equipo Repsol Honda y desea estar con Repsol porque es el patrocinador con más historia en MotoGP, que lleva más años ligado al motociclismo y a la competición. Y, obviamente, eres la envidia del 'paddock' porque a todos les gustaría tener una moto pintada de Repsol y estar por todos los sitios", añadió el catalán.
Este echará "todo de menos". "Desde que entré en 2013 he estado con la misma gente, los mismos colores, el mismo 'box', con todo igual, la pregunta es qué no echaré de menos", se sincera el piloto español, que confía en que "muchos aficionados que son del Repsol Honda seguirán apoyando al '93' (su número) también". "Sigo creyendo que estamos separados, pero siempre unidos, de alguna manera estamos unidos. Será el equipo, haga lo que haga, y vaya como vaya en mi nueva etapa, este será el equipo de mi vida, de mi carrera deportiva y por el que seré recordado", reiteró.
El de Cervera reconoce la dificultad que existe siempre para afrontar un fin de semana de carreras, pero "más cuando se trata de emociones". "Habrá momentos seguramente inolvidables en este Gran Premio, ya que quiero hacerlo lo mejor posible en pista y para ello necesito estar cien por cien concentrado", apuntó.
En la entrevista, grabada en el mismo Circuito Ricardo Tormo, recuerda que "debut soñado" en la categoría 'reina', con la conquista de su primer título en "el año más divertido porque había cero presión, todo valía y todo salía bien". "Tuve la oportunidad de subir al equipo donde habían corrido mis ídolos, además de compartir 'box' con uno de ellos que fue, y es, Dani Pedrosa. A partir de ahí empezaron estos 11 años que, si lo valoras bien, han sido exitosos", manifestó Márquez.
El piloto español tiene "muchos momentos" guardados en la retina de su paso por un equipo con el que ha hecho "muchísimos eventos". "Como he estado tantos años he visto pasar a mucha gente dentro de Repsol, diferentes equipos como de comunicación como de patrocinio, que siempre han rendido de diez. Me he sentido muy bien tratado, me siento un privilegiado", confiesa.
El ilerdense rememora lo "increíble" que fue su estreno en MotoGP en el Gran Premio de Catar donde finalizó tercero. "Estás en Moto3, luego en Moto2, pero son cosas con las que no eres realista. Luego, cuando llegas y lo ves, te das cuenta de que son palabras mayores", advirtió, mientras que sobre si se quedaba con alguna carrera en particular, puntualizó que ganó "muchas" y que en ocasiones no fue por "ser el más rápido, sino siendo el más listo o gestionándolas de otra manera" y que ha ganado "muchas veces".
En cuanto a la más compleja, cree que la de Cheste en 2013, cuando se jugaba el título con Jorge Lorenzo, "no fue la más sufrida, pero sí la más larga con diferencia". "Tenía que quedar cuarto si Lorenzo ganaba la carrera y fue muy larga porque cuando vas al límite vas superconcentrado y se te pasan las vueltas rápidas, pero cuando vas con dudas, no vas al límite, no te puedes caer, piensas más cosas y se me hizo eterna, pero me dio el título", indicó.
"HE APRENDIDO MÁS DE LOS MOMENTOS DIFÍCILES Y LOS GOLPES RECIBIDOS"
Además, Márquez sabe que ha "aprendido más de los momentos difíciles y de los golpes recibidos durante todos estos años", pero que también ha "disfrutado y bailado mucho de los momentos buenos". "No puedes comparar un chaval de 20 años con un 'hombrecillo' de 30, con todas las ideas más claras y más maduro. He aprendido muchas cosas y la decisión que he tomado ahora con 30 años hubiera sido incapaz de tomarla con 20, 22, 23, 24 o 25 años porque no era suficientemente maduro para hacerlo", admite.
"No ha cambiado el carácter, la sonrisa y, sobre todo, la ambición, que sigue siendo la misma que cuando empecé. Estoy aquí para intentar ser el mejor en pista y para ello tienes que intentar buscar la mejor solución. Hay muchas veces que cuesta, pero no dormiría tranquilo si me retirara el día de mañana con dudas o con '¿Y si hubiera hecho esto o lo otro?'. En todo momento soy un piloto que, tanto dentro como fuera de pista, hace lo que siente y lo que creo necesario para intentar luchar por los sitios de cabeza", prosiguió.
El hexacampeón del mundo de MotoGP subraya que "de pequeño" se podía imaginar "la vida de piloto, pero no la vida de estrella" y que sobre todo se queda con "toda la gente que te está apoyando la valoras muchísimo, no solo en los buenos momentos, también en los malos". "Para mí no tiene sentido dar vueltas solo en el circuito, tiene sentido la competición, crear emociones a la gente, ver el 'paddock' lleno, que venga una niña o un niño pequeño y se ponga a llorar o se quede parado, son reacciones que creas en la gente que nunca me hubiera imaginado", advierte.
Finalmente, hace referencia a la curva 1 del Ricardo Tormo, donde en 2017 hizo su "mítica 'salvada' de izquierda". "Fue una de las mejores 'salvadas' que he tenido y fue el inconformismo, estaba en carrera tan tranquilo que intenté liderar y escaparme para crear esa tensión y volver a concentrarme en la carrera y, en una de esas, casi me caigo", destacó.