WASHINGTON (AP) — Funcionarios de la Reserva Federal llegaron a la conclusión hace unas semanas de que la inflación está disminuyendo constantemente, y acordaron vigilar de cerca los datos entrantes para asegurarse de que el ritmo de los aumentos de precios seguirá ralentizándose en dirección a su objetivo del 2%, de acuerdo con las minutas de su reunión publicadas el martes.
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A consecuencia de ello, los encargados de formular políticas decidieron dejar sin cambios su principal tasa de interés de referencia, pero mantenerla elevada durante un periodo prolongado. En una conferencia de prensa posterior a la reunión, el presidente de la Fed, Jerome Powell, dejó abierta la posibilidad de que haya otra alza en las tasas de interés, aunque la mayoría de los economistas dijeron creer que el banco central ya no las aumentará.
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En la reunión, llevada a cabo del 31 de octubre al 1 de noviembre, los funcionarios acordaron que volverían a incrementar su principal tasa de interés si los datos económicos “indican que el progreso” hacia el objetivo del 2% “es insuficiente”, señalan las minutas. Eso deja entrever que la inflación tendría que acelerarse para que la Reserva Federal volviera a subir las tasas.
La decisión del banco central de mantener sin cambios su tasa de interés a corto plazo por segunda reunión consecutiva supuso la pausa más larga en su campaña de incrementos en las tasas desde que comenzó a subirlas en marzo de 2022. Desde entonces, la Fed ha subido su tasa de referencia 11 veces, desde casi cero hasta cerca del 5,4%, su nivel más alto en 22 años.
Las minutas publicadas el martes permiten entrever que los encargados de las políticas de la Fed están esperanzados de que los próximos datos confirmen que la inflación se dirige de nuevo hacia su nivel deseado. Ante las señales que indican que las presiones sobre los precios se están enfriando, los inversores de Wall Street creen que el banco central podría empezar a recortar su tasa de interés oficial incluso en mayo, según la CME Fedwatch Tool, una herramienta que proporciona las probabilidades de que la Fed modifique sus tasas.
Funcionarios de la Reserva Federal prevén que los futuros datos económicos “ayudarán a aclarar hasta qué punto” la inflación seguía bajando, “la demanda se estaba moderando” y “los mercados laborales estaban alcanzando un mayor equilibrio entre la demanda y la oferta”, según las minutas.
De todas formas, los funcionarios “enfatizaron que tendrían que ver más datos que indiquen que las presiones inflacionarias están disminuyendo” para asegurarse de que el incremento de precios se dirigía de nuevo hacia su objetivo de 2%.
La inflación ha disminuido desde su pico de 9,1% en junio de 2022 a 3,2% el mes pasado. El informe de octubre también mostró que los precios subyacentes, que excluyen las volátiles categorías de alimentos y energía, se enfriaron de septiembre a octubre, e insinuó que la inflación sigue cediendo.
