MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
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Según ha informado este martes la compañía, la facturación ordinaria entre los meses de abril septiembre se expandió un 30,3%, hasta los 5,666 billones de yenes (34.836 millones de euros). Por segmentos de negocio, la principal fuente provino de los ingresos asociados a los intereses, que supusieron 3,532 billones de yenes (21.716 millones de euros), un 49,4% más.
Al mismo tiempo, la facturación por comisiones o tasas creció un 10,5%, hasta los 1,029 billones de yenes (6.327 millones de euros), y las rentas por operaciones bursátiles fueron de 186.222 millones de yenes (1.145 millones de euros), un 111,2% más. Otros ingresos operativos y ordinarios completaron el montante.
Los gastos operativos repuntaron un 17,8% durante los primeros seis meses del presente año fiscal, hasta sumar 4,386 billones de yenes (26.966 millones de euros).
El responsable de dicho incremento ha sido el coste achacable a los intereses, que subió un 233,5%, hasta los 2,303 billones de yenes (14.159 millones de euros), y solo fue compensado parcialmente por el retroceso de gastos operativos varios. De su lado, los gastos generales y administrativos permanecieron mayormente estables en los 1,425 billones de yenes (8.761 millones de yenes).
Asimismo, la entidad nipona ha asegurado que, al cierre del mes de septiembre, la rentabilidad financiera (ROE, por sus siglas en inglés) fue del 10,65%, lo que se tradujo en un alza interanual de 7,73 puntos porcentuales. La ratio de capital CET1, la que mide los activos de mayor calidad, fue del 10,5%, seis décimas más que doce meses antes y dos más que en marzo de 2023.
En el conjunto del presente ejercicio fiscal, que finalizará en marzo del año que viene, MUFG espera contabilizar un beneficio neto atribuido de 1,3 billones de yenes (7.993 millones de euros), sin cambios desde las previsiones de mayo, y mantener la ratio de capital CET1 en la horquilla del 9,5% al 10%.