MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
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Al Sadr, apartado en los últimos meses de la vida política pero todavía poseedor de una extraordinaria capacidad de movilización, ha solicitado al Ejecutivo y al Legislativo del país, "contando a todos sus grupos y orientaciones", que unan fuerzas "por el bien del pueblo iraquí, en contra de intereses privados, y voten a favor del cierre de la Embajada americana en Irak por su respaldo ilimitado a los terroristas sionistas" de acuerdo con el texto recogido por la agencia oficial de noticias de Irak, INA.
El clérigo, no obstante, ha llamado a la calma e insistido en la necesidad de "proteger al personal diplomático" que todavía queda en la Embajada -- sus trabajadores no esenciales recibieron el pasado domingo la orden de salir del país -- para no exacerbar la tensión.
El nuevo conflicto entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, que comenzó el pasado 7 de octubre, ha generado un enorme repunte de las tensiones en Irak, traducido en ataques de milicias proiraníes, simpatizantes con la causa palestina, a bases con presencia estadounidense dentro del país.
Al Sadr, la gran figura de la religión chií del país, ya hizo gala de su popularidad hace dos semanas al convocar a decenas de miles de simpatizantes en la plaza Tahrir de Bagdad, en la capital iraquí, para protestar por los ataques israelíes sobre la Franja de Gaza en respuesta al asalto de Hamás.
Si su última petición de este viernes no progresa como espera el religioso, Al Sadr ha avisado que se reserva "el derecho a adoptar una nueva postura, pendiente todavía de anuncio" antes de insistir a sus fieles que hagan "un ejercicio de obediencia, no actúen a título propio y se abstengan de emplear armas en las protestas".