MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
La necesidad de hacer llegar ayuda humanitaria a los más de 2 millones de palestinos atrapados en la Franja de Gaza y que se encuentran en una situación desesperada por la falta de agua, alimentos y combustible es algo en lo que parecen coincidir los líderes mundiales, pero sin embargo no hay consenso es en si lo que hace falta es un alto el fuego o una pausa humanitaria.
Estados Unidos y Reino Unido han rechazado abiertamente la opción de un alto el fuego, mientras que en la UE los Veintisiete tratan de alcanzar un consenso sobre lo que reclamar. Algunos países como España apuestan abiertamente por un alto el fuego, como ha señalado el presidente, Pedro Sánchez, a su llegada a Bruselas, otros se inclinan por una pausa humanitaria y otros no quieren llegar tan lejos.
Del otro lado, Rusia apuesta por un alto el fuego, la opción por la que se decantan también los países árabes. Nueve de ellos --Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Arabia Saudí, Omán, Qatar, Kuwait, Egipto y Marruecos-- han publicado un comunicado conjunto en el que piden al Consejo de Seguridad de la ONU que "obligue" a todas las partes a acatar "un alto el fuego inmediato".
CUÁL ES LA DIFERENCIA
Pero, ¿qué diferencia hay entre un alto el fuego y una pausa humanitaria? La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) define la pausa humanitaria como "un cese temporal de hostilidades meramente por fines humanitarios" y destaca que "requiere el acuerdo de todas las partes relevantes". En general, precisa, se acuerda "para un periodo definido y un área geográfica específica en la que van a realizarse las actividades humanitarias".
Por lo que se refiere al alto el fuego, el manual de la ONU sobre mediación en este tipo de casos resalta que "no existe una definición única y universalmente aceptada" respecto a qué es, sino que son las partes las que en el marco de una negociación acuerdan lo que conlleva.
No obstante, incide en que normalmente es "un acuerdo formal y escrito" en el que se expone su objetivo, se define su área geográfica de aplicación así como la fecha de entrada en vigor y su duración. Además, suele recoger "las actividades militares y no militares permitidas y prohibidas" y también cómo se va a monitorizar y verificar su cumplimiento.
ISRAEL TIENE LA ÚLTIMA PALABRA
Con todo, como reconoce el codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH), Jesús A. Núñez, la clave está en que Israel dé su visto bueno a que pueda haber algún tipo de cese de las hostilidades para permitir la entrada de asistencia humanitaria, dado que no cree que Hamás pueda oponerse.
"Veo difícil de explicar ante la población de Gaza que se opongan a la entrada de más camiones en lugar de menos o a que cese la violencia durante un tiempo", comenta en declaraciones a Europa Press. En el caso de Israel acceder sería una forma de "salvar la cara" para que amainen las críticas por las muertes de civiles.
"Una pausa humanitaria supone asumir la detención momentánea de la violencia en el mejor de los casos pero luego va a continuar una vez Israel considere que es suficiente y volverá la campaña militar", advierte este experto, para quien esta opción es "insuficiente" y constituye "un paliativo de mínimos".
Núñez reconoce que "una pausa humanitaria sería bienvenida pero en ningún caso sirve para poner solución al conflicto" y por eso apuesta por un alto el fuego, ya que la primera opción deja en manos de Israel las decisiones. "Todo lo que quede por debajo son peticiones de mínimos", insiste el codirector del IECAH.
CORREDORES HUMANITARIOS
En este apartado entrarían los llamados corredores humanitarios, otra de las opciones que están sobre la mesa. Según explica el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), los corredores humanitarios son "acuerdos entre las partes de un conflicto armado para permitir el paso seguro durante un tiempo limitado de tiempo en un área geográfica específica".
Pueden usarse para "permitir a civiles marcharse, para que entre asistencia humanitaria o para permitir la evacuación de los heridos, los enfermos o los muertos", precisa el CICR, que advierte de que "debido a sus limitaciones en alcance, no son una solución ideal".
Esta ha sido la vía empleada tanto en la guerra de Ucrania, para evacuar zonas asediadas por las fuerzas rusas, como en Siria, para que la población civil abandonara las zonas bajo control rebelde antes del asalto de las fuerzas gubernamentales.
Así la cosas, Núñez incide en que todo pasa por que haya "voluntad política". A su juicio, el único país con capacidad para ejercer de "mediador" con Israel y que acepte es Estados Unidos.
Por lo que se refiere a la UE, cuyos líderes están reunidos este jueves y viernes en Bruselas y tratan de pactar unas conclusiones respecto a la necesidad de una tregua en la violencia, lo que se buscan es enviar una "señal de que hay voluntad política de actuar". Pero, advierte, "una cosa es que la UE lo pida y otra que Israel lo haga".