ROMA, 11 (EUROPA PRESS)
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El Papa Francisco y el cardenal limosnero Konrad Krajewski almorzaron este martes con un grupo de personas pobres en el marco de la Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos sobre la sinodalidad.
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Según ha informado el presidente de la Comisión para la Información, Paolo Ruffini, este miércoles en rueda de prensa sobre el Sínodo, este martes se estableció un "pequeño 'Círculo Menor'" en la Casa Santa Marta, donde algunos pobres de Roma fueron invitados a almorzar con el Papa y el cardenal limosnero Konrad Krajewski.
Tal y como ha explicado Ruffini, también a ellos se les ha preguntado "qué esperaban de la Iglesia" y "su respuesta", ha dicho, fue: "'Amor. Sólo amor".
La sexta congregación general del Sínodo que se está celebrando en el Vaticano se abrió con una meditación del cardenal Arthur Roche, que evocó el "peligro de una guerra sangrienta" con la violencia en Gaza e Israel en las últimas horas.
Además, en referencia a los trabajos de este martes por la tarde y este miércoles por la mañana, el presidente de la Comisión para la Información ha explicado que han estado centrados en temas como los conflictos en el mundo, la pobreza, los abusos y la identidad sexual.
"Se habló de nuestra credibilidad puesta en entredicho por escándalos como los abusos sexuales y de la necesidad de erradicar todo abuso sexual, de poder y espiritual y de hacer todo, seguir haciendo todo, para estar cerca de las víctimas", ha explicado Ruffini.
Además, sobre el tema de la identidad sexual, se ha indicado que debía abordarse "con responsabilidad y comprensión, permaneciendo fieles al Evangelio y a las enseñanzas de la Iglesia", tal y como ha explicado el Prefecto de Comunicación.
Ruffini ha precisado que algunos pidieron "un mayor discernimiento sobre la enseñanza de la Iglesia en materia de sexualidad" mientras que otros opinaron que "no hay necesidad de un mayor discernimiento". En respuesta a preguntas de los periodistas, explicó que "no ha habido nada que pueda enmarcarse en el estereotipo de la polarización". "Es una experiencia de compartir", ha subrayado.
La pregunta que se hicieron los participantes en el Sínodo ha sido "cómo encarnar la pastoral del amor entre las parejas homosexuales, entre los divorciados, permaneciendo fieles a las enseñanzas de la Iglesia". "Más o menos todos los que intervinieron sobre estos temas dijeron que hay que rechazar toda forma de homofobia", ha apuntado Paolo Ruffini, explicando que varios miembros dijeron "que muchas dificultades surgen del desconocimiento de la realidad y del itinerario personal de los individuos".
Sobre la cuestión de los migrantes, algunos obispos han "pedido ayuda a otras conferencias episcopales" que se encuentran en mejores situaciones desde el punto de vista de la integración y la acogida y también se ha apuntado "la necesidad de que los emigrantes y refugiados respeten las leyes de los países en los que se encuentran".