MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
Turk, que ha hablado este lunes ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, ha recordado que países como Burkina Faso, Chad, Malí y Níger, escenario de revueltas en los últimos años, figuran "entre los ocho países menos desarrollados del mundo" y sufren además los efectos del cambio climático, "una crisis a la que no han contribuido".
"Los recursos que se necesitan para la supervivencia, como tierra fértil y agua, disminuyen, lo que deriva en un conflicto entre comunidades", ha explicado Turk, apuntando otra de las múltiples derivadas de los desastres naturales, catalizador a su vez de violencia.
La ayuda internacional para atender la actual emergencia va, a su juicio, "demasiado lenta", pese a que 2022 ya fue "el año más mortífero en el Sahel desde que comenzó la crisis hace una década" y a que la actividad de grupos armados amenaza con expandirse hacia países de la costa occidental de África.
Frente a estos retos, el Alto Comisionado ha reclamado más y mejor gobernanza. "Necesitamos una vuelta urgente de los gobiernos civiles y espacios abiertos donde las personas puedan participar, influir, acompañar y criticar las acciones del Gobierno o la falta de acción", ha remachado, sin aludir a ningún país en concreto durante su discurso.