MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
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El director del parque 'Olas Rugientes', Mohamad Babei, ha especificado en declaraciones a la agencia iraní de noticias FARS que las instalaciones fueron cerradas tras el cierre de operaciones en la noche del domingo por "no cumplir con la castidad y el 'hiyab'".
"Hace un tiempo se trasladó un aviso al centro, pero durante la pasada noche fue clausurado por las autoridades", ha manifestado, antes de lamentar que los trabajadores "han quedado sin empleo en un momento álgido de la temporada".
La medida ha tenido lugar en medio del endurecimiento de la postura de las autoridades sobre el uso del velo, tras las masivas manifestaciones que estallaron en septiembre de 2022 tras la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una mujer detenida en Teherán por supuestamente no llevar bien puesto el 'hiyab'.
Así, el portavoz de la Policía iraní, Said Montazeralmahdi, anunció a mediados de julio el redespliegue de la 'Policía de la moral' en las calles del país, mientras que el Parlamento está estudiando un proyecto de ley que endurecería las penas contra aquellas mujeres declaradas culpables de no llevar el velo en público.
En este contexto, un grupo de relatores de Naciones Unidas tildaron la semana pasada de "apartheid de género" el nuevo borrador y destacaron que "las autoridades parecen estar gobernando a través de una discriminación sistemática con la intención de forzar a las mujeres y niñas a una sumisión total".
El jefe del aparato judicial de Irán, Gholamhosein Mohseni-Ejei, afirmó a principios de julio que los tribunales del país han abordado hasta ahora más de 20.000 casos relacionados con las protestas y sostuvo que se han separado los casos de los "arrepentidos" de aquellos que participaron en disturbios de cara a un proceso de amnistías por parte del líder supremo del país, el ayatolá Alí Jamenei.
Las autoridades iraníes han eximido a las fuerzas de seguridad de toda culpa sobre la muerte de Amini, si bien han reconocido ciertos excesos durante la represión de las protestas, que se han saldado con cerca de 500 muertos, según balances facilitados por varias organizaciones no gubernamentales.