MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
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El barcelonés completó su excepcional temporada -cinco victorias, nueve podios y dos poles- con una exhibición en Portland para coronarse por segunda vez. Palou salió quinto, pero tras una gran salida se puso tercero en la segunda curva, con un gran exterior al neozelandés Scott Dixon y el estadounidense Colton Herta.
Tras un inicio algo accidentado, Palou fue alternando con Dixon el liderato, aunque la estrategia, de nuevo, dio ventaja al español, que lideró la carrera durante 69 vueltas de las 110 del GP. El de Chip Ganassi Racing gestionó mejor las paradas en boxes que sus rivales y en el giro 84 se puso definitivamente al frente.
Después de una bandera amarilla y una sensacional resalida, el bicampeón pudo alejarse de Felix Rosenqvist, con menos agarre, gracias a sus neumáticos más frescos, para comandar en esa recta final con mano de hierro. El español gozó de dos segundos de ventaja cuando estaban solo 15 vueltas, con un piloto sueco más pendiente de no perder su posición ante Dixon que en atacar al barcelonés, que solo tuvo que gestionar su colchón para cruzar primero y festejar su segundo título de la IndyCar.
"Fue un fin de semana increíble. Teníamos coches realmente rápidos. Sabíamos que teníamos que intentarlo y simplemente corrimos como lo hemos hecho durante toda la temporada. Súper orgulloso de la victoria y súper orgulloso del segundo campeonato. Nunca pensé que sería campeón de IndyCar, y serlo dos veces se siente increíble, como un sueño", valoró Palou en declaraciones publicadas por la competición.
Palou, que al final sacó 91 a Dixon en la general, es el primer piloto que sella un título de la competición en la penúltima carrera del Mundial, desde que lo lograra Sebastien Bourdais en 2007. Además, el Chip Ganassi consigue su quinto título en la IndyCar en la última década.