Las aspiraciones al Super Bowl invaden a los Jets de Nueva York pese a su dudosa distinción de poseer la sequía de postemporada más larga vigente en las cuatro principales ligas profesionales deportivas en los Estados Unidos, junto con los Sabres de Búfalo en la NHL con 12 campañas.
PUBLICIDAD
Obtener a Aaron Rodgers puede hacer que ocurra algo así a una franquicia que ha decaído desde que perdió ante Pittsburgh la final de la Conferencia Americana tras la temporada de 2010.
PUBLICIDAD
Aquella fue la última vez en que no figuraron los Patriots de Nueva Inglaterra, ni los Chiefs de Kansas City en la disputa por el campeonato de la AFC. Y mientras el dúo Tom Brady y Bill Belichick comandaba la conferencia, seguido por el de Patrick Mahomes y Andy Reid, los Jets sucumbían entre 11 temporadas para el olvido, quedando en el último lugar de la AFC en siete ocasiones.
Al menos Aaron Rodgers contará con caras muy conocidas a las cuales lanzar: El ex Packers Randall Cobb, al igual que Allen Lazard, ha llegado también a los Jets como es el caso de el ex receptor de los Chiefs Mecole Hardman. Eso refuerza a una plantilla que cuenta con los actuales novatos del año: el receptor Garrett Wilson, y el cornerback Sauce Gardner.
El corredor Dalvin Cook estuvo seis años con los Vikings y saltó hacia la oportunidad de recibir de manos de Rodgers, firmando un contrato de un año con los Jets.
Nueva York adquirió también al coordinador ofensivo Nathaniel Hackett, que supervisó la ofensiva de los Packers entre 2019-2021 cuando Rodgers ganó dos veces el premio al Jugador Más Valioso además de llegar al Pro Bowl en esas tres temporadas.
Hackett llega refrescado tras un calamitoso debut como entrenador en jefe en Denver donde terminó con una marca de 4-11 antes de ser despedido en medio de la peor temporada en la carrera de Russell Wilson.
Orlando Brown Jr. es otro de los notables veteranos que tendrán nuevo hogar, tras cambiar de bandos en la incipiente rivalidad entre Kansas City y Cincinnati, luego de ganar un anillo de campeón en su segundo año con los Chiefs. Brown firmó un contrato de 4 años por 64 millones de dólares para proteger el punto ciego de Joe Burrow en Cincinnati.
El corredor Ezekiel Elliott fue dejado en libertad por los Cowboys de Dallas en una movida para alejarse del tope salarial. Elliott firmó con Nueva Inglaterra por un año y 6 millones de dólares.
Los Vikings de Minnesota tuvieron que deshacerse de salarios y estrellas, entre ellas el defensivo Za’Darius Smith, tres veces seleccionado al Pro Bowl, que ha sido enviado a los Browns de Cleveland, donde hará mancuerna con Myles Garrett, uno de los mejores cazamariscales de la NFL.
El quarterback Jimmy Garoppolo llegó a los Raiders de Oakland tras seis temporadas de altibajos en San Francisco. El otrora reemplazante de Brady vuelve a reunirse con Josh McDaniels en un acuerdo por tres años y $68 millones.
El tight end Darren Waller fue cambiado de los Raiders a los Giants para darle a Daniel Jones una mejora considerable en aquella posición.
Luego de estremecer a la NFL con la adquisición del receptor Tyreek Hill el año pasado, los Dolphins de Miami han causado otro impacto, adquiriendo al cornerback tres veces primer equipo All Pro Jalen Ramsey procedente de los Rams de Los Ángeles a cambio de una selección de tercera ronda y del tight end Hunter Long.