CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El gobierno de Canadá anunció el viernes que se une a Estados Unidos en la disputa comercial por las restricciones que ha puesto México al maíz transgénico para consumo humano y, eventualmente, para consumo animal.
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“Canadá comparte las preocupaciones de Estados Unidos en el sentido de que México no cumple con las obligaciones científicas y de análisis de riesgo previstas” en el tratado de libre comercio de América del Norte, (T-MEC), indicaó un comunicado divulgado por la embajada canadiense en México.
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Al igual que las autoridades estadounidenses, Canadá se une al panel de solución de controversias ya que considera que las medidas adoptadas por México “no están respaldadas científicamente y tienen el potencial de perturbar innecesariamente el comercio en el mercado de América del Norte”.
El gobierno mexicano alega que el maíz transgénico puede tener efectos sobre la salud, incluso cuando se utiliza como forraje, pero aún no ha presentado pruebas. Por eso, quiere prohibir el maíz transgénico para consumo humano y, quizás, eventualmente prohibirlo también para consumo animal.
La Secretaría de Economía de México insiste en que estas medidas no tienen afectaciones comerciales y, por lo tanto, no violan el tratado.
No obstante, México es el principal importador del maíz amarillo estadounidense, la mayoría del cual es transgénico y que se destina a la alimentación animal. El maíz para consumo humano, el blanco, se cultiva casi en su totalidad en el país, aunque algunos alimentos procesados podrían contener maíz transgénico.
El panel de expertos para la solución de la controversia tendrá alrededor de medio año para estudiar la queja y dar a conocer sus hallazgos. Se podrían aplicar sanciones comerciales si se determina que México violó el tratado.
