MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
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En concreto, señala que la reciente quiebra de varias entidades financieras estadounideses --en particular, Signature Bank, Silicon Valley Bank y Fist Republic Bank-- ha provocado una "mayor incertidumbre en el mercado", aunque aclara que Santander "no se ha visto afectada materialmente" por estos eventos. Sin embargo, reconoce que las condiciones cambiantes del mercado son un "factor de riesgo importante".
Así, la filial estadounidense de Santander ve "probable" un aumento de la competencia y de los tipos de los depósitos de clientes en el corto y medio plazo, que aumente la atención por parte del regulador, de los mercados y una reforma del riesgo de liquidez, capital y tipos de interés, tal y como recoge el diario 'El País', que ha adelantado este martes la noticia.
Además, señala que probablemente la FDIC aplicará un tasa especial para sufragar las pérdidas que se han producido en el fondo de garantía de depósitos estadounidense.
En concreto, el pasado mes de mayo, la agencia encargada de gestionar el fondo de garantía de depósitos en EEUU propuso aplicar una tasa especial del 0,125% a los depósitos no asegurados de los grandes bancos. De hecho, la FDIC estima que 113 entidades estarán afectadas por esta aportación extraordinaria y que los bancos con más de 50.000 millones de dólares en activos sufragarían el 95%.
De esta forma, se pretende paliar la factura que ha supuesto para el FGD hacer frente a los depósitos no garantizados de Silicon Valley Bank y Signature Bank. En este sentido, cabe recordar que el fondo de garantía en EEUU cubre hasta los 250.000 dólares, si bien en el caso de estas entidades medianas se decidió cubrir también a aquellos que superaban esta cantidad. De hecho, la agencia calcula que el coste de cubrir estos depósitos fue de 15.800 millones de euros.
De esta manera, Santander cree que esta medida le supondrá un coste de unos 60 millones de euros (55,1 millones de euros al cambio actual) en total, que se abonarían trimestralmente durante los próximos dos años, empezando en el primer trimestre de 2024.
La entidad también cree que la incertidumbre y las condiciones del mercado dificultarán el crecimiento de los ingresos netos por intereses y conllevarán un aumento del riesgo crediticio y del gasto por pérdidas crediticias.
Por otro lado, Santander también indica en el informe trimestral que ha mejorado el seguimiento de los riesgos asociados a los tipos de interés y a la evolución de la liquidez.
Por ejemplo, ha reforzado su posición de liquidez disponible, ya que a cierre de junio, Santander USA Holding contaba con 37.841 millones de dólares (34.779 millones de euros), un 30% más que a finales de marzo.
El beneficio atribuido de la filial estadounidense de Santander en el primer semestre del año fue de 667 millones de euros, un 39% por debajo del obtenido en el mismo periodo de 2022, debido, en gran medida, a los mayores costes de financiación y a la normalización prevista en las dotaciones por insolvencias.