BRASILIA (AP) — Cuando era presidente de Brasil, Jair Bolsonaro le ordenó a uno de sus colaboradores que vendiera la lujosa joyería no declarada que había recibido como regalo y le transfiriera el dinero, acusó el abogado del excolaborador el viernes.
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Cezar Bittencourt, que representa al ex mano derecha de Bolsonaro, teniente coronel Mauro Cid, dijo que su defendido relató haber recibido esas órdenes del entonces mandatario poco antes de que este dejara el cargo a finales del año pasado.
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Las aseveraciones de Cid figuraron inicialmente en una entrevista publicada el viernes por la revista brasileña Veja, y Bittencourt las confirmó después por teléfono a The Associated Press.
Bittencourt dijo que, en diciembre de 2022, Cid preguntó sobre un reloj Rolex que el gobierno de Arabia Saudí obsequió al presidente en 2019. Bolsonaro respondió que Cid debía “encargarse de ello", lo que a la larga derivó en que el excolaborador vendiera dos relojes en Estados Unidos y le entregara el dinero, según el abogado.
Hace una semana, la Policía Federal de Brasil acusó a Bolsonaro de haber recibido casi 70.000 dólares en efectivo por la venta de ambos relojes. Estas piezas formaban parte de un total de tres juegos de joyería que Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos obsequiaron al entonces presidente.
Funcionarios de la presidencia de Bolsonaro trajeron la joyería a Brasil sin declararla, lo que suscitó sospechas de lavado de dinero y posesión personal ilegal de activos del gobierno. La investigación se hizo pública en marzo.
Brasil exige a sus ciudadanos que llegan en avión desde el extranjero que declaren bienes cuyo valor sea mayor a 1.000 dólares y paguen un impuesto de 50% del valor que supere ese límite. La joyería habría estado exenta del impuesto si era un regalo oficial para Brasil, pero Bolsonaro no podía quedársela.
Bolsonaro y sus abogados sostienen que los juegos de joyería eran regalos personales y por lo tanto podían venderse según él lo deseara. Los investigadores dijeron que Bolsonaro no registró la joyería en su colección personal sino hasta poco antes de que dejara el cargo.
Cuando el asunto salió a la luz pública en marzo, Bolsonaro dijo en un principio que no sabía nada de los obsequios, pero sus aliados han dado distintas versiones. El viernes, Bolsonaro dijo en un video al periódico brasileño Estadao que Cid tenía autonomía sobre cómo manejar la joyería y no recibió órdenes.
El informe de Bittencourt sobre las aseveraciones de Cid constituye la primera vez que el excolaborador hace declaraciones públicas sobre la joyería. Cid fue arrestado en mayo por acusaciones de falsificar tarjetas falsas de vacunación contra el COVID-19 para miembros de su familia, y para Bolsonaro y su familia.
En julio, Cid fue llamado a testificar ante una comisión legislativa especial que investiga los desórdenes que simpatizantes de Bolsonaro escenificaron el 8 de enero en la capital Brasilia. Cid se mantuvo en silencio durante la sesión.
El viernes, siete policías militares de alto rango fueron arrestados en relación con los ataques del 8 de enero.
Pocas horas después, Alexandre de Moraes, ministro del Supremo Tribunal Federal, autorizó que se levantara el secreto bancario a las cuentas de Bolsonaro y Cid en Estados Unidos.
