MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
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El cierre del espacio aéreo, ordenado al poco de comenzar los combates, intenta facilitar los ataques de las Fuerzas Aéreas de Sudán sobre las posiciones rebeldes, en particular en la capital, Jartum, y en sus ciudades hermanas de Jartum Norte y Omdurmán. Sin embargo, los enfrentamientos, por el momento, no han inclinado el conflicto por una de las partes.
El Ejército sudanés ha avisado este domingo de que solo volverá a la mesa de negociaciones de paz en Yedá (Arabia Saudí) si las RSF cumplen con lo acordado y se retiran de zonas residenciales y carreteras del país para no poner en peligro a la población civil.
Por su parte, los paramilitares sudaneses acusan al Ejército de poner en peligro a la población civil con bombardeos indiscriminados y consideran que cualquier retirada posicional, en especial en la capital, Jartum, implicaría perder el control de los sitios estratégicos que antes de la guerra tenían a cargo de custodiar, como la refinería de petróleo, la sede de la radio y la televisión nacional y el edificio del palacio presidencial.
Los militares abandonaron el pasado día 27 las conversaciones tras denunciar que las RSF estaban desplegadas en hogares civiles y espacios públicos que se negaban a evacuar, en una violación de la llamada Declaración para la Protección de los Civiles firmada el 11 de mayo por ambos bandos menos de un mes después del estallido de un conflicto que está arrasando el país.
El líder del movimiento paramilitar de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), Mohamed Hamdan Dagalo, alias 'Hemedti', pidió el viernes un cambio de liderazgo en el Ejército de Sudán para llegar a un acuerdo que ponga fin a las hostilidades.
La guerra ha dejado hasta el momento más de 1.100 muertos, según el Ministerio de Salud sudanés, pero las cifras reales podrían ser mucho más elevadas teniendo en cuenta la violencia intercomunitaria desencadenada en las regiones de Kordofán y Darfur. Además, más de tres millones de personas se han visto desplazadas, incluidas cerca de 800.000 que han huido a países vecinos.