MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El conjunto madridista acumuló refuerzo anímico en su preparación, cuyo próximo partido será el 'importante' Clásico ante el FC Barcelona, con una victoria en un partido con ocasiones en los dos lados, sobre todo en una segunda mitad mucho más abierta, y donde decidieron a su favor dos tantos de muy bella factura al inicio y al final de un encuentro donde se reencontró con sus ex Carlos Casemiro y Raphael Varane.
Carlo Ancelotti varió su once inicial respecto al primer amistoso del domingo ante el AC Milan y esta vez apostó por un mediocampo con el físico de Aurelien Tchouameni y Eduardo Camavinga y el talento de Luka Modric y un Bellingham que sigue dejando buenas sensaciones y muestras de su calidad en estos dos primeros partidos.
El joven centrocampista inglés, que esta vez sólo jugó una mitad, fue el encargado de abrir el marcador tras recibir, en posible posición ilegal, un pase largo desde la defensa de Antonio Rüdiger lo bajó de forma exquisita para superar a Andres Onana con una sutil vaselina y estrenarse con la camiseta madridista.
A partir de ahí, el encuentro estuvo equilibrado, con llegadas para ambos equipos, con Vinicius, que formó pareja arriba con Rodrygo Goes, gozando de las dos mejores ocasiones, una bien detenida por el nuevo portero del United y otra en la que no pudo conectar bien su disparo en buena posición.
El conjunto de Erik ten Hag también dispuso de buenas oportunidades para haber igualado, con un potente disparo de Alejandro Garnacho, y dos más claras de Mason Mount y Marcus Rashford que Andrey Lunin, también destacado, acertó a detener para dejar su portería a cero.
Tras el descanso, Ancelotti movió mucho el banquillo con la entrada de seis jugadores para unos segundos 45 minutos muy abiertos y con llegadas para ambos equipos, aunque fueron los 'Diablos Rojos' los que mejor empezaron en busca del 1-1 lo antes posible.
Garnacho volvió a poner a prueba desde fuera del área a Lunin, que acertó de nuevo poco después a meter una buena mano a una buena internada de Scott McTominay, mientras que Antony también lo intentó con un potente disparo.
Pero a partir de ahí, el Real Madrid fue aprovechando los espacios y pudo sentenciar con la entrada de Joselu, que fue el que más lo intentó y que tuvo tres buenas opciones antes de sentenciar el encuentro en los últimos minutos. Primero, Onana le negó el gol con una buena parada tras rematar un gran pase de Brahim Díaz, luego su cabezazo se fue fuera por poco y finalmente tampoco pudo empujar a la red un cabezazo desviado de Eder Militao en un saque de esquina.
Sin embargo, el nuevo '9' del 14 veces campeón de Europa metió la que aparentemente era más complicado, una ágil chilena para dejar sin respuesta al guardameta camerunés después de un buen centro de Lucas Vázquez desde la derecha y que finiquitó el choque justo después de que Bruno Fernandes lo hubiese intentado. La siguiente prueba será ya el duelo ante el FC Barcelona en Arlington este sábado (23.00 horas).