MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
En la actualidad, las reservas mínimas se remuneran al tipo de interés de la facilidad de depósito del BCE, que pasará a ser del 3,75% tras la subida de tasas anunciada este jueves por el Consejo de Gobierno de la institución.
De este modo, teniendo en cuenta que las reservas mínimas exigidas alcanzaban en promedio los 165.143 millones de euros, según reflejan los datos del BCE, la bajada de la remuneración al 0% en vez del 3,75% de la facilidad de depósito supondrá negar a los bancos ingresos de alrededor de 6.192 millones anuales.
En octubre del año pasado, el Consejo de Gobierno del BCE decidió reducir la retribución de las reservas mínimas desde el tipo de las operaciones principales de financiación, que pasará a ser del 4,25% tras la decisión de este jueves, al tipo de la facilidad de depósito, habitualmente medio punto porcentual por debajo del tipo de refinanciación.
Las reservas mínimas son saldos que las entidades de crédito deben mantener en promedio en su banco central nacional durante un periodo de mantenimiento. En concreto, las entidades de crédito están obligadas a mantener una cantidad mínima equivalente al 1% de pasivos específicos, principalmente depósitos de clientes.
En un comunicado, el BCE ha señalado que, en las actuales condiciones de amplia liquidez, el interés pagado por las reservas que los bancos mantienen en la facilidad de depósito, es decir, reservas por encima del nivel mínimo requerido, supone el principal instrumento del Consejo de Gobierno para fijar la postura de la política monetaria en su lucha contra la inflación.
"La decisión de hoy de reducir la remuneración de las reservas mínimas preservará la eficacia de la política monetaria al mantener el grado actual de control sobre la orientación de la política monetaria y garantizar la plena transmisión de las decisiones sobre tipos de interés del Consejo de Gobierno a los mercados monetarios", ha señalado.
Al mismo tiempo, el BCE considera que la medida mejorará la eficiencia de la política monetaria al reducir la cantidad total de interés que debe pagarse sobre las reservas para implementar la postura adecuada.