QUITO (AP) — Dos periodistas de un medio digital local de Ecuador abandonaron el país tras haber recibido amenazas en su contra, según denunciaron y también anunció el martes la organización Fundamedios, que vela por la libertad de expresión en este país.
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Andersson Boscán es fundador de La Posta, y Mónica Velásquez, integrante inicial del mismo, formaron parte del equipo investigador que denunció un presunto caso de corrupción en Ecuador, en el cual se vinculaba a Danilo Carrera, cuñado del presidente Guillermo Lasso, y a funcionarios públicos, especialmente del sector energético. Ese caso, también apuntó a supuestos vínculos de allegados al poder con integrantes de mafias albanesas.
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La primera periodista en dejar Ecuador este año, fue Karol Noroña del medio digital GK en marzo y en junio dejó su lugar y ciudad de trabajo, Santo Domingo fue los Tsáchilas, la comunicadora Lissete Ormaza, en ambos casos debido a amenazas. Esa ciudad está 70 kilómetros al suroeste de la capital.
Los niveles de violencia, delincuencia, secuestro y extorsión se han disparado en los últimos meses debido a la acción de bandas criminales nacionales e internacionales, que se disputan territorios para la distribución de droga y rutas de exportación, entre otros delitos, lo que ha enrarecido el ambiente en todos los niveles sociales.
Boscán, de doble nacionalidad ecuatoriana y venezolana, radicado en Ecuador desde niño, y la ecuatoriana Velásquez viajaron “con destino a un país seguro”, destacó Fundamedios. Las amenazas contra la también pareja de esposos empezaron en octubre del 2021, según la denuncia de su medio, pero se recrudecieron tras la publicación de una serie de entregas periodísticas acerca de ese caso. Otro de los fundadores de La Posta, Luis Eduardo Vivanco, sigue en Ecuador pese a que también está amenazado, confirmó AP.
Citando una carta de los periodistas, Fundamedios, destacó que fueron advertidos por integrantes de “inteligencia extranjera” de que la semana pasada llegó a Ecuador un grupo operativo de la mafia albanesa para atentar contra sus vidas y de otras personas.
