WIMBLEDON, Inglaterra (AP) — Marketa Vondrousova, la flamante campeona de Wimbledon, sostenía cuatro golosinas de chocolate en su mano izquierda cuando la checa se sentó atender a la media docena de reporteros en una de sus últimas entrevistas de la noche.
Tal vez un regalo especial para sí misma luego de consagrarse a sus 24 años como campeona de un Grand Slam.
“Me encantan los dulces, siempre estoy comiendo algunos”, dijo sonriente Vondrousova horas después de superar el sábado a Ons Jabeur por 6-4, 6-4 en la Cancha Central, convirtiéndose en la primera mujer que se consagra en el All England Club sin partir como cabeza de serie.
Se le mencionó que algunos tenistas sólo se permiten este tipo de indulgencias cuando acaba un torneo.
“No”, respondió Vondrousova, “No me importan esas cosas. Inclusive comí McDonald’s después, yo creo que, (tras derrotar a Jessica Pegula en los cuartos de final) simplemente soy una persona normal”.
Le tomó una hora y 20 minutos a Vondrousova imponerse a una oponente mejor clasificada y más experimentada bajo el techo retráctil que se cerró por la fuerte brisa.
“Jugó quizás una final perfecta” dijo Jabeur.
Podría ser así puesto que una estadística clave del sábado fue que Vondrousova cometió 13 errores no forzados, y la tunecina Jabeur sumó 31. Pero hay algo más que agregar. Vondrousova, quien escalará del puesto 42 al número 10 – el más alto de su carrera – este lunes en el ranking de la WTA, se describió a sí misma como una persona que no debe ser tomada a la ligera, una jugadora que cuenta con una mezcla de talento y agallas que seguramente no tendrá su última aparición en las fases más importantes del tenis.
A sus 19 años – también sin ser cabeza de serie – Vondrousova alcanzó la final del Abierto de Francia sobre la arcilla roja antes de caer ante Ash Barty. Dos años después llegó a la final de los Juegos Olímpicos de Tokio, quedándose con la presea de plata luego de caer ante la suiza Belinda Bencic. Sumado a lo que alcanzó en esta edición de Wimbledon al eliminar a cinco cabezas de serie, incluyendo a la sexta Jabeur, quien ha sido subcampeona en tres finales consecutivas de torneos grandes.
Antes de hilar sus siete victorias en las últimas dos semanas, Vondrousova tenía un registro de 1-4 en el All England Club.
“No era tan buena jugando sobre el césped”, dijo el sábado pensando en aquellos resultados anteriores, además de recordar cuando daba sus primeros pasos aprendiendo a jugar el tenis desde los ocho años en un club de Praga.
"Así que nunca pensé en ganar en Wimbledon. Es más, si alguien me hubiera dicho esto antes de iniciar el torneo, le diría que ‘No, estás loco’. Creo que la arcilla ha sido la mejor para mí. Ahora es el césped”, añadió, riéndose luego de responder.