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Vingegaard retiene el maillot amarillo en el Tour de Francia. Poels gana en solitario la 15ta etapa

Jonas Vingegaard (amarillo) y Tadej Pogacar rumbo a la meta de la 15ta etapa del Tour de Francia, el domingo 16 de julio de 2023, en Saint-Gervais Mont-Blanc. (AP Foto/Thibault Camus) AP (Thibault Camus/AP)

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SAINT-GERVAIS MONT-BLANC, Francia (AP) — Con una semana más por delante en el Tour de Francia, el memorable duelo entre Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar está para cualquiera.

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Vingegaard mantuvo intacta su ventaja de 10 segundos sobre Pogacar como líder general del Tour tras una etapa en la que veterano neerlandés Wout Poels se fugó en solitario para triunfar en los Alpes.

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Poels, quien formó parte de una fuga inicial en la 15ta etapa el domingo, aprovechó con creces un corto pero pronunciado ascenso a unos siete kilómetros de la meta para desprenderse del resto.

“Esta victoria significa mucho para mí”, dijo Poels. "Desde muy pequeño soñaba con ganar una etapa en el Tour de Francia.

“Nunca pude ir por una victoria de etapa. Hoy sí se pudo hacerlo, y estoy muy feliz”, añadió.

El belga Wout van Aert, compañero de Vingegaard en el equipo Jumbo-Visma entró segundo, más de dos minutos detrás. El francés Mathieu Burgaudeau completó el podio.

Inmersos en un vibrante duelo por el ‘maillot’ amarillo de líder general desde el comienzo de la ronda gala, el danés Vingegaard — defensor del título — y el esloveno Tadej Pogacar — dos veces campeón de la carrera — pedalearon junto de principio a fin.

Los dos han sido muy superiores al resto durante las primeras dos semanas. El tercero de la general, el español Carlos Rodríguez, está 5 minutos y 21 segundos detrás. Victorioso el día previo, Rodríguez volvió a ser el mejor de los otros candidatos.

Pogacar lanzó un sprint cuando quedaban 900 metros para llegar a la meta, pero Vingegaard no le perdió pisada y no cedió tiempo.

“Tratamos de hacer duro el último ascenso. Pero me di cuenta de que Jonas estaba súper bien y que no iba a poder soltarle, porque la subida era demasiado fácil”, comentó Pogacar.

“Podemos encarar la tercera semana con mucha confianza... Estamos con buenas piernas", añadió.

Tras una jornada de descanso el lunes, la pulseada Vingegaard-Pogacar se retomará con la contrarreloj del martes.

“Mañana tenemos día de descanso, y mis compañeros tendrán otro más el martes”, dijo Pogacar. “Después de eso veremos cómo afrontamos estas últimas etapas decisivas. En cuanto a la contrarreloj, conozco bien el recorrido. Creo que puede encajar muy bien con mis características”.

El recorrido de la última semana cuenta con un par de etapas en las alturas para zanjar el duelo previo al arribo en París el próximo domingo.

“Imagino que para los espectadores cada día es un poco mejor que el anterior", señaló Vingegaard. “Hoy me he sentido con mayor control de la situación que otros días. Podemos estar contentos de cómo nos ha ido la etapa. Me alegro de que sea día de descanso mañana. Será bueno para las piernas”.

Un día después que una caída masiva provocó el abandono de varios corredores, un nuevo incidente afectó la competencia. En el kilómetro 52, un espectador al costado de la ruta sin querer derribó al estadounidense Sepp Kuss, compañero Vingegaard.

Jumbo-Visma informó que Dylan van Baarle y Nathan van Hooydonck estuvieron entre los corredores que se fueron al pavimento. Vingegaard pedaleaba cerca de sus compañeros, pero salió bien librado.

“Me gustaría pedir a los aficionados que simplemente disfruten de la carrera y nos animen, sin meterse en la carretera a nuestro paso ni lanzarnos cerveza”, dijo Vingegaard.

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