AUSTIN, Texas, EE.UU. (AP) — El fiscal general de Texas, Ken Paxton, no testificará en su próximo juicio político, lo que podría resultar en la destitución permanente del republicano, de acuerdo con su equipo legal.
En una larga declaración publicada el lunes por la noche, el abogado principal de Paxton criticó los procedimientos que llevaron a la Cámara de Representantes de Texas, controlada por el Partido Republicano, a acusar en mayo al máximo representante de la principal fuerza policial del estado.
El juicio en el Senado de Texas está programado para comenzar el 5 de septiembre.
“Ellos tuvieron la oportunidad de que el fiscal general Paxton testificara durante su investigación simulada, pero se negaron a hacerlo”, declaró el abogado Tony Buzbee en un comunicado. “No cederemos ante este uso del poder del estado como arma, maligno, ilegal y sin precedentes, en la cámara del Senado”, agregó.
Un portavoz de los líderes de la Cámara de Representantes estatal que llevan el juicio político no respondió de momento el martes un mensaje en busca de comentarios.
Paxton, un republicano, está suspendido temporalmente de su cargo a la espera del resultado de su juicio por 20 artículos de juicio político que incluyen cargos de soborno y abuso de poder.
En un caso separado, el FBI investiga a Paxton por acusaciones de que usó su poder para ayudar a un donante. Ese donante fue acusado en un tribunal federal en Austin el mes pasado por cargos de hacer declaraciones falsas a los bancos.
Paxton también está esperando juicio por cargos de fraude de valores que datan de 2015. Se ha declarado inocente y nunca ha prestado declaración en los ocho años del caso, según los legisladores que buscan enjuiciarlo políticamente.