CIUDAD DE GUATEMALA (AP) — Una semana después de que los guatemaltecos acudieran a las urnas, la Corte de Constitucionalidad frenó la oficialización de los resultados de los comicios generales en los que fueron elegidos los dos candidatos a presidente que, por tener los mayores porcentajes de voto, irán a una segunda vuelta el 20 de agosto.
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El tribunal aceptó recursos presentados por varias de las fuerzas políticas que no alcanzaron el balotaje -entre ellas el oficialismo y sus aliados- para que se frenara la publicación de resultados oficiales, alegando presuntas irregularidades en las elecciones.
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La decisión de la Corte de Constitucionalidad de interrumpir el proceso electoral y mantenerlo sin resultado oficial, hasta ser revisado, derivó en fuertes críticas de organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos y de países como Estados Unidos o el bloque de la Unión Europea que exigen a las autoridades guatemaltecas que respeten el pronunciamiento electoral de sus ciudadanos.
Desde que comenzó el proceso electoral, Guatemala ha vivido las elecciones más accidentas de su historia reciente, con exclusión de candidatos, discrecionalidad en los criterios para inscribir a los postulantes y ahora un bloqueo judicial que busca frenar el avance de los resultados de las elecciones.
A continuación AP explica la actual situación electoral en el país centroamericano.
¿CUÁLES FUERON LOS RESULTADOS DE LAS ELECCIONES GENERALES DEL 25 DE JUNIO?
Con el 99% de las actas revisadas el TES comunicó en la madrugada del lunes los resultados preliminares que daban el primer lugar al partido de centroderecha Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) que postula a la ex primera dama Sandra Torres, quien obtuvo 15,8%. En segundo lugar se ubicó el doctor en sociología Bernardo Arévalo del izquierdista Movimiento Semilla, que alcanzó 11,7% de los votos válidos. Un 17,3% de los sufragios fue nulo y hubo una participación del 60% de los 9,3 millones de ciudadanos habilitados para votar.
En palabras de Irma Elizabeth Palencia Orellana, presidenta del Tribunal Supremo Electoral, del lunes posterior a la votación, los resultados eran entonces “prácticamente son invariables”.
Tras la votación, las Juntas Receptoras de votos de cada una de las 122.293 mesas electorales contaron cada papeleta y plasmaron los resultados en actas ante la presencia y firma de fiscales de los partidos políticos -momento en el cual según la ley se podían hacer impugnaciones- las cuales fueron entregadas a digitadores para que las incluyeran en los Centros de Digitación y Transmisión de resultados instalados en cada centro de votación.
En forma paralela, un digitador al azar hizo el mismo procedimiento para verificar la información e incluirla en el Programa Informático para Transmisiones de Resultados Preliminares (TREP), un nuevo portal que adquirió el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y que muestra en tiempo real las tendencias de la votación y los resultados preliminares de las elecciones. El portal da acceso a los ciudadanos a las actas.
Los guatemaltecos concurrieron a las urnas el domingo 25 de junio para elegir presidente, vicepresidente, alcaldes municipales, diputados al Congreso y diputados al Parlamento Centroamericano.
La Ley Electoral y de Partidos Políticos establece que si ningún candidato a presidente obtiene el 50% de los votos válidos más uno se debe realizar una segunda vuelta electoral para elegir presidente entre los dos aspirantes más votados.
¿QUÉ PASÓ CON LOS RESULTADOS DE LAS ELECCIONES?
El resultado preliminar del conteo de votos -que culminó en la madrugada del domingo al lunes- está pendiente de una oficialización formal por parte del Tribunal Electoral, pero fue impugnado por diez de los 29 partidos por supuestas fallas en el sistema TREP.
Nueve de esos partidos solicitaron un amparo a la Corte de Constitucionalidad para que detenga la publicación de los resultados oficiales, permita una segunda revisión y se cotejen las actas contra el TREP, a lo que la Corte accedió.
La Corte también ordenó que, en caso de ser necesario, se realice de un nuevo conteo de votos, algo que según constitucionalistas no está establecido en la ley guatemalteca.
Las Juntas, que tienen cinco días hábiles después de haber sido notificadas el domingo para cumplir los requerimientos del tribunal, anunciaron que iniciaran el martes con la revisión de escrutinios de 19 Juntas Electorales Departamentales. Otras cuatro se harán el miércoles y jueves para un total de las 23 Juntas Departamentales y Distrital.
Los partidos que impugnaron la elección alegaron vicios en el escrutinio, en la digitación de datos y en la presentación de los resultados, presentando actas en las que, según alegaron, había tachones o no sumaban bien los resultados o no aparecen en el sistema.
Entre las fuerzas políticas que presentaron el amparo y que no alcanzaron más de 8% de los votos en los comicios se encuentran los que quedaron en tercero, cuarto y quinto lugar y que eran favoritos en las encuestas como el partido Cabal, que llevaba de candidato al excanciller Edmond Mulet; el oficialismo que postulaba a Manuel Conde y la coalición Valor-Unionista que impulsaba la candidatura de Zury Ríos Sosa -hija del fallecido exdictador Efraín Ríos Montt-.
A su vez, el partido Valor de Ríos Sosa también presentó una denuncia contra las Juntas Municipales y Departamentales y los digitadores -poco más de 400 personas- por presunto fraude.
Arévalo pidió a la Corte de Constitucionalidad revertir su decisión, pero aún no ha recibido una respuesta.
Tras la decisión de la Corte, el TSE dijo que el proceso electoral contó con “herramientas tecnológicas y logísticas modernas y científicas para proteger el régimen democrático del país” pero que, en cumplimiento del fallo, suspendía la oficialización de los resultados.
¿QUÉ DICEN LOS OBSERVADORES Y ENTES INTERNACIONALES DE LOS RESULTADOS?
Organismos que observaron el proceso electoral y dieron por válido el proceso, a pesar de incidentes aislados el día de las elecciones, dijeron que la ciudadanía se expresó claramente.
Por su parte, muchos ciudadanos han hecho públicas las actas de las mesas donde emitieron sus votos para mostrar que no hubo impugnaciones o alteraciones.
Países como Estados Unidos, Alemania, Francia, España, Italia, Suecia y Noruega, entre otros, han manifestado su preocupación por la interferencia del Poder Judicial en el proceso electoral pero el gobierno guatemalteco pidió respeto a la soberanía del país.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo a través de su vocero que sigue con preocupación los acontecimientos en Guatemala.
“El secretario general ha tomado nota de las preocupaciones expresadas y confía en que cualquier medida que se adopte se hará de conformidad con las normas electorales aplicables”, dijo su vocero Farhan Haq en conferencia de prensa el lunes.
En tanto, la misión de observación de la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresó que la orden de la Corte de hacer una revisión adicional y cotejo de las actas no está contemplada en la legislación guatemalteca.
“Alimentar una narrativa de fraude sin el sustento probatorio menoscaba la voluntad popular y la institucionalidad democrática. Las elecciones se deben de ganar en las urnas, no inhabilitando candidaturas o impugnando resultados legítimos que emanan del electorado. En el juego democrático, corresponde a los ganadores actuar con humildad y a los perdedores con dignidad”, expresó la OEA.
Ante la situación, la OEA anunció el lunes que desplegará de nuevo a sus observadores para dar fe de la segunda revisión.
¿CÓMO ANALIZAN LOS EXPERTOS LA SITUACIÓN POST ELECTORAL?
Francisco Jiménez, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Rafael Landívar, dijo que la situación es producto de una tensión entre un sistema político corrupto que se aferra al poder y la necesidad de cambio que manifestó la sociedad en las urnas.
“El voto que hizo llegar a la segunda vuelta a los partidos está representando lo nuevo de la sociedad guatemalteca... El voto a favor del candidato Arévalo no fue un voto ideológico, sino un voto por la diferencia y anticorrupción y un cambio de sistema político”.
Tiziano Breda, investigador experto en América Latina del Instituto Affari Internazionali en Italia, dijo que la maniobra judicial es “uno de los intentos más descarados y menos corroborados, en épocas recientes, de cuestionar un proceso electoral”.
Breda explicó que el proceso fue reconocido como confiable y transparente por organismos internacionales y que la decisión de la Corte de Constitucionalidad es un desafío a la comunidad internacional y a la sociedad.
“La situación parece responder a la preocupación de aquellas fuerzas políticas que han sido excluidas de la segunda vuelta y del Congreso de que pueda haber algún cambio en la política del país y que esto rompa... con los círculos de impunidad y corrupción que se han fraguado e instalado en los últimos años”, indicó.
La duda es, sostuvo, hasta qué punto está dispuesta a llegar la justicia. "Me parecería sorpresivo que decidieran... revertir y manipular los resultados de las votaciones con el fin de excluir al Movimiento Semilla y con ello destruir la dignidad del proceso electoral que conlleve repercusiones a nivel internacional y deslegitime a cualquiera que resulte ganador de una segunda vuelta”, concluyó Breda.