BUENOS AIRES (AP) — El ministro del Interior de Argentina, Eduardo de Pedro, hijo de desaparecidos durante la última dictadura militar (1976-1983) y ahijado político de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, lanzó el jueves su precandidatura a presidente de la coalición oficialista Unión por la Patria para las elecciones generales de octubre.
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“Sé que no será un trabajo fácil, pero si de algo puedo dar fe en mi vida es que nunca tuve las cosas fáciles...quiero ser presidente, el presidente de todas las familias argentinas”, anunció el funcionario a través de un video publicado en sus redes sociales poniendo fin a días de especulaciones sobre el precandidato del kirchnerismo, la corriente de centro-izquierda dentro del peronismo gobernante que lidera la exmandataria Fernández de Kirchner (2007-2015), actual vicepresidenta.
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La precandidatura de “Wado”, como se lo apoda, se suma a la del embajador en Brasil, Daniel Scioli, quien se lanzó semanas atrás. De esta forma, el oficialismo definirá en las primarias del 13 de agosto al candidato que competirá en octubre para suceder al mandatario Alberto Fernández, quien declinó buscar la reelección en medio de una crisis inflacionaria.
De Pedro, de 46 años, era apenas un niño cuando en un operativo de las Fuerzas Armadas lo secuestraron junto a su madre Lucila Révora, militante de una organización guerrillera Montoneros. Su padre Enrique, también miembro de ese grupo, había sido capturado un año antes. Ambos progenitores integran la nómina de 30.000 desaparecidos durante el régimen.
El niño estuvo en manos de los militares varios meses hasta que su familia materna se puso en contacto con allegados al gobierno de facto y logró recuperarlo. Como secuela de aquella época, De Pedro sufre trastorno en el habla.
De Pedro, abogado de profesión, inició su militancia política en la universidad y también fue miembro de la organización H.I.J.O.S, conformada por los hijos de desaparecidos.
En 2006, junto al hijo de Fernández de Kirchner, Máximo, fundaron la agrupación política La Cámpora, que con el tiempo se convirtió en el espacio dominante dentro de las distintas fuerzas de centro-izquierda que conforman el kirchnerismo.
Tras el triunfo del peronismo en 2019, De Pedro asumió como ministro de Interior, en una cartera encargada de la relación de las provincias con el gobierno central y también de organizar el proceso electoral. Está por verse si el funcionario pide licencia para evitar suspicacias.
El lanzamiento de De Pedro confirma la división interna de Unión por la Patria -nombre elegido por la coalición oficialista formada por distintas corrientes peronistas y aliados para los próximos comicios- a la hora de definir un candidato de unidad, justo cuando se aproxima el límite para inscribir precandidaturas del 24 de junio.
Si no hay un acuerdo interno, De Pedro y Scioli competirán el 13 de agosto en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Esas internas definirán las fórmulas de todas las fuerzas políticas argentinas que están habilitadas a participar en las generales.
