BUENOS AIRES (AP) — La presidenta de la Comisión Europea exhortó el martes a que el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur se concrete antes de fin de año luego de analizar con el presidente argentino las trabas para su implementación y las asimetrías económicas entre los futuros socios.
“Creo que tendríamos que fijarnos un objetivo ambicioso, por ejemplo que se concluya antes de que venza año. Concluir quiere decir el acuerdo político, luego habrá trabajo técnico que hacer”, dijo Ursula von der Leyen a periodistas tras reunirse con el mandatario argentino Alberto Fernández en la sede del gobierno.
La funcionaria señaló que existe una “ventana de oportunidades” para formalizar el pacto entre los 27 países europeos y los cuatro integrantes del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- y “si se cierra sería una pena porque hay mucho potencial que se podrá desencadenar”.
El acuerdo comercial vincularía dos mercados con una población total de unos 800 millones de personas y que en conjunto suman aproximadamente una cuarta parte del Producto Interno Bruto mundial.
El acuerdo reduciría los aranceles aduaneros y facilitaría el acceso de los exportadores agropecuarios sudamericanos al mercado europeo, así como el de los fabricantes europeos a los países del Mercosur.
Fernández dijo a su turno que el acuerdo comercial es deseable, pero debe tener en cuenta las asimetrías de las economías de cada una de las regiones para evitar que algunos países se vean perjudicados.
El mandatario argentino indicó que por primera vez pudo “hablar claramente” de cuáles son los problemas y confió en que antes de fin de año ambos bloques firmen el acuerdo político una vez que hayan resuelto las asimetrías mencionadas y “las nuevas normas que en materia ambiental ha dictado la UE y afectan al acuerdo inicial”.
Los miembros de la UE concluyeron en 2019 las negociaciones sobre un amplio acuerdo comercial con el Mercosur que aún no ha sido ratificado por ninguno de los países individualmente.
En marzo la UE envió una carta al Mercosur en la que pretendía establecer requisitos medioambientales más estrictos para los países sudamericanos con el fin de persuadir a las naciones europeas para que ratificaran el acuerdo.
Von der Leyen señaló al respecto, sin dar más precisiones, que el bloque europeo espera la respuesta a esa misiva para avanzar en “cómo podemos llegar a soluciones de compromisos para cuestiones que queden pendientes".
La funcionaria acotó que "el grueso del trabajo ya se ha hecho”.
Von der Leyen llegó a Argentina procedente de Brasil, donde se reunió con el presidente Luiz Inacio “Lula” Da Silva en el marco de una gira que también incluirá a Chile y México.
Luego de su encuentro con la titular de la Comisión Europea, el mandatario brasileño afirmó que "la premisa que tiene que existir entre socios estratégicos es de confianza mutua y no de desconfianza y sanciones”.
La carta de marzo no menciona explícitamente sanciones sino que propone hacer obligatorios algunos de los objetivos medioambientales establecidos por el Acuerdo de París.
La ratificación del acuerdo se estancó durante la presidencia del predecesor de Lula, el conservador Jair Bolsonaro (2019-2022), debido a la preocupación de la UE por sus escasas políticas medioambientales, así como al deseo europeo de proteger a sus agricultores de las importaciones más baratas del Mercosur.