BEIJING (AP) — Un funcionario chino presentó una queja ante el embajador surcoreano en China, en represalia después de que el enviado de Beijing a Corea del Sur fuera convocado la semana pasada por sus comentarios en los que reprochaba a Seúl inclinarse a favor de Estados Unidos.
PUBLICIDAD
El viceministro de Relaciones Exteriores de China, Nong Rong, expresó su descontento con la respuesta de Seúl a la reunión de la semana pasada entre el embajador chino Xing Haiming y un líder de la oposición surcoreana, según un comunicado emitido el domingo por el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
PUBLICIDAD
Nong alegó que Xing tenía el deber de reunirse con diferentes personas en Corea del Sur. Dijo esperar que Seúl reflexionara sobre la relación entre ambos países y que trabajara con China para promover lazos sanos y estables, agregó el comunicado.
El roce diplomático entre China y Corea del Sur se produce en medio de una competencia feroz entre Washington y Beijing por influencia global.
Corea del Sur, cuya economía depende en gran medida de las exportaciones de chips de memoria para computadoras y otros productos tecnológicos, ha tenido problemas para lograr un equilibrio entre Estados Unidos —su aliado militar durante décadas— y China, el mayor comprador de sus productos.
El viernes, el primer viceministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Chang Ho-jin, criticó a Xing por sus declaraciones, que calificó de “sin sentido y provocativas” realizadas durante una reunión con el líder del Partido Demócrata de Corea del Sur, Lee Jae-myung, un rival clave del presidente conservador surcoreano Yoon Suk Yeol.
Durante la reunión de la semana pasada, Xing acusó al gobierno de Yoon de inclinarse excesivamente hacia Estados Unidos y de dañar sus relaciones con China.
Xing dijo que Corea del Sur tenía toda la culpa de las “muchas dificultades” en las relaciones bilaterales, citando su creciente déficit comercial con China, que atribuyó a los esfuerzos de “deschinaización”, aparentemente refiriéndose a las acciones de las empresas surcoreanas para alejar sus cadenas de suministro de China.
Seúl respondió airada y rápidamente ante sus comentarios, y acusó a Xing de violar los protocolos diplomáticos e interferir en la política interna de Corea del Sur.
