José Mourinho tendrá la oportunidad de atrapar un sexto título europeo, pero deberá encontrar la manera de frenar a un Sevilla que intentará conquistar la Liga Europa por séptima vez.
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La Roma accedió a la final al sustraer el jueves un empate 0-0 ante el Bayer Leverkusen en Alemania, exhibiendo el rígido despliegue defensivo que caracteriza a los equipos de Mourinho. El club italiano avanzó al imponerse 1-0 en el marcador local tras salir triunfante del partido de ida en casa.
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Los Giallorossi se medirán con el Sevilla, que remontó para vencer 2-1 a la Juventus en tiempo extra y evitar una final italiana.
Un gol de Suso puso el empate para el conjunto español a los 71 minutos y el delantero argentino Erik Lamela sentenció con un testarazo en los primeros compases de la prórroga del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. Dusan Vlahovic había adelantado a la Juve a los 65.
El choque por el título se escenificará el 31 de mayo en la capital húngara de Budapest. El Sevilla, el equipo más laureado en el torneo de segunda importancia del continente, echará de menos al lateral argentino Marcos Acuña tras ser expulsado por doble amonestación cuando restaban cinco minutos del tiempo extra.
Mourinho busca encadenar títulos continentales con la Roma, ya que el año pasado les llevó a la conquista de la Europa Conference League. Previamente ganó la Liga Europa con el Porto y el Manchester United, además de un par de ediciones de la Liga de Campeones con el Porto y el Inter de Milán.
“Es un equipo especial. No puede pedirle a Roma, pero son unos jugadores que se merecen algo especial”, dijo el entrenador portugués.
Sevilla espera salvar una temporada turbulenta con un séptimo trofeo en la Liga Europa.
Se ubica en el décimo sitio de La Liga española, pero ha mostrado una vez más que su especialidad es este certamen, eliminando al Manchester United en los cuartos de final.
El club hispalense ganó el título seis veces entre 2006 y 2020.
EUROPA CONFERENCE LEAGUE
Con un gol de Pablo Fornals en los descuentos, West Ham avanzó tras derrotar de visitante 1-0 al AZ Alkmaar de Holanda. El club de la Liga Premier disputará su primera final europea en 47 años. Los Hammers sellaron un triunfo 3-1 en el global.
Tras el partido, hubo hechos de violencia protagonizados por algunos seguidores holandeses, quienes trataron de ingresar en una zona reservada para amigos y familiares de los jugadores visitantes.
Varios jugadores del West Ham, incluyendo Michail Antonio, Said Benrahma, Aaron Cresswell y Flynn Downes treparon encima de los carteles publicitarios, en un intento por apaciguar la situación.
“No puedo explicar lo que ocurrió ni por qué”, dijo el técnico del West Ham, David Moyes. “Sólo puedo decir que los jugadores se involucraron porque era la sección familiar, y la mayoría de sus familiares y amigos estaban ahí. Ése fue probablemente el motivo de la reacción”.
West Ham enfrentará a la Fiorentina en la final, el 7 de junio en Praga.
Así, las tres copas europeas tendrán equipos italianos en sus finales. Fiorentina eliminó al Basilea suizo.
El suplente checo Antonin Barak anotó el gol decisivo a los 129 minutos en una prórroga para que la Viola derrotase a domicilio 3-1 al cuadro suizo y alcanzar su primera final europea desde 1990.
Aparte de la Roma y Fiorentina, el Inter chocará con el Manchester City en la final del torneo de mayor prestigio — la Liga de Campeones.
Luego que Basilea ganó 2-1 en su visita a Florencia, el cuadro toscano niveló el global gracias al doblete del atacante argentino Nicolás González.
González apareció libre de marca en el palo lejano para poner el 1-0 tras un tiro de esquina a los 35.
El delantero Zeki Amdouni empató la cuenta 1-1 para Basilea a los 55, un resultado que instalaba a los suizos en su primera final europea.
Pero González perforó las redes por segunda vez en St.Jakob-Park con zurdazo rasante a los 72 para forzar la prórroga.
