MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
"A medida que nos adaptamos a un entorno comercial radicalmente cambiado, continuamos apoyando a nuestros clientes para que aborden los desafíos de su cadena de suministro", declaró Vincent Clerc, consejero delegado de Maersk, en referencia al proceso de normalización del mercado.
Asimismo, la compañía precisó que en el primer trimestre del año asumió un impacto adverso de 374 millones dólares (339 millones de euros) por deterioros y cargos por reestructuración de las marcas A.P. Moller - Maersk.
De su lado, la facturación del mayor grupo industrial de Dinamarca entre enero y marzo alcanzó los 14.207 millones de dólares (12.867 millones de euros), un 26,3% por debajo de los ingresos registrados en el primer trimestre del ejercicio precedente.
Los ingresos de la división de transporte marítimo de mercancías cayeron un 36,6%, hasta 9.873 millones de dólares (8.941 millones de euros), mientras que el negocio de logística elevó un 20,5% su facturación, hasta 3.471 millones de dólares (3.143 millones de euros).
A su vez, la división de terminales redujo un 22,5% sus ingresos, hasta 876 millones de dólares (793 millones de euros), mientras que la unidad de servicios marítimos facturó un 8,5% más, hasta 602 millones de dólares (545 millones de euros).
De cara al conjunto del año, la danesa ha mantenido su previsión de que la corrección de inventarios se completará a finales del primer semestre, lo que conducirá a un entorno de demanda más equilibrado.
"La orientación para todo el año permanece sin cambios, y se espera que el primer trimestre sea el trimestre más fuerte del ejercicio", adelantó la empresa.
Además, Maersk espera que el crecimiento del PIB mundial en 2023 se mantendrá moderado y que el mercado mundial de contenedores marítimos crecerá en un rango del -2,5% al +0,5% con la expectativa de que el negocio de Ocean crecerá en línea con el mercado.