SEÚL, Corea del Sur (AP) — La poderosa hermana del gobernante de Corea del Norte dijo que su país seguirá exhibiendo su poderío militar en respuesta a un nuevo acuerdo entre Washington y Seúl de intensificar su disuasión nuclear para contrarrestar la amenaza atómica norcoreana, lo cual ella insiste que muestra su “brutal" hostilidad hacia Pyongyang.
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Kim Yo Jong también profirió insultos contra el mandatario estadounidense Joe Biden, quien al término de una cumbre con el presidente surcoreano Yoon Suk Yeol dijo el miércoles que un ataque nuclear norcoreano contra Estados Unidos o sus aliados "resultará en el fin de cualquier régimen” que emprendiera tal acción.
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Biden y Yoon se reunieron en Washington en medio del recrudecimiento de las tensiones en la península coreana debido que tanto el ritmo de las exhibiciones de armas norcoreanas como el de la realización de maniobras militares entre Estados Unidos y Corea del Sur ha aumentado en un ciclo de reciprocidad.
Desde comienzos de 2022, Corea del Norte ha efectuado disparos de prueba de unos 100 misiles, incluidas diversas exhibiciones de misiles balísticos intercontinentales diseñados para alcanzar territorio continental de Estados Unidos, así como una serie de disparos de corto alcance que el gobierno norcoreano describió como un simulacro de ataques nucleares contra Corea del Sur.
Se prevé ampliamente que el gobernante norcoreano Kim Jong Un intensifique sus presiones en las próximas semanas o meses, en un momento en que continúa acelerando su campaña dirigida a consolidar la posición norcoreana como una potencia nuclear y a la larga negociar concesiones económicas y de seguridad de parte de Estados Unidos desde una postura de fortaleza.
Durante su reunión, Biden y Yoon anunciaron nuevas medidas disuasorias que prevén el atraque periódico de submarinos estadounidenses provistos con armas nucleares en Corea del Sur por primera vez en décadas, e incrementar el entrenamiento militar entre ambos países. También se comprometieron a elaborar planes para consultas presidenciales bilaterales en caso de un ataque nuclear norcoreano, el establecimiento de un grupo consultivo atómico y mejorar el intercambio de información sobre planes de operación de armas atómicas y estratégicas.
En sus comentarios publicados en la prensa estatal, Kim Yo Jong dijo que el acuerdo entre Estados Unidos y Corea del Sur "refleja la voluntad de acción más enemiga y agresiva” de ambos aliados contra Pyongyang, y pondrá la paz y la seguridad regionales en un “peligro más grave”.
Kim Yo Jong, destacada funcionaria de política exterior en el régimen de su hermano, indicó que la reunión en Washington incrementó aún más la convicción de Corea del Norte de reforzar la capacidad de sus armas nucleares. Dijo que será de especial importancia para el gobierno norcoreano perfeccionar la “segunda misión de esta fuerza disuasoria", en aparente referencia a la doctrina de reforzamiento nuclear del país, que prevé ataques atómicos preventivos en una amplia gama de escenarios en los que pudiera percibir que su gobierno está amenazado.
Ella arremetió contra Biden por su categórica advertencia de que una agresión nuclear norcoreana podría resultar en el fin del régimen de Pyongyang, a la que describió como “una chochera del vejarrón”, un “disparate” y una “bravura irresponsable”. Sin embargo, dijo que Corea del Norte no puede simplemente descartar las palabras de Biden como “un disparate de un vejestorio”.
“El hecho de que esa expresión haya sido usada directamente por el presidente de Estados Unidos, país más hostil, significa la amenaza retórica que no podemos pasar fácilmente por alto y exige ponerse dispuesto a las tremendas consecuencias”, afirmó Kim.
“Mientras los enemigos se pongan más fanáticos de los ejercicios de guerra nuclear y desplieguen mucho más propiedades estratégicas nucleares en la región de la Península Coreana, recurriremos más, en lo proporcional a ello, al ejercicio del derecho a la autodefensa”, agregó.
