KINSASA, República Democrática del Congo (AP) — Al menos 60 cadáveres fueron descubiertos en varias aldeas de la provincia de Kivu del Norte, en el oeste de la República Democrática del Congo, informaron el miércoles las autoridades.
PUBLICIDAD
Residentes de las aldeas de Kashali y Kazaroho, en el territorio de Rutshuru, fueron asesinados durante varios días por rebeldes del grupo M23, dijo Isaac Kibira, adjunto al gobernador de la zona de Bwito.
PUBLICIDAD
“Lamentamos ver cómo la población está siendo masacrada por el M23... más de 60 cadáveres (fueron encontrados) atados con mosquiteros. Otros estaban atados con bolsas”, declaró Kibira a los medios de comunicación locales.
El grupo rebelde M23, formado en su mayoría por congoleños de etnia tutsi, saltó a la fama hace 10 años, cuando sus combatientes tomaron Goma, la mayor ciudad del este del Congo, en la frontera con Ruanda. Su nombre deriva del acuerdo de paz del 23 de marzo de 2009, que acusa al gobierno congoleño de no implementar. El grupo rebelde estuvo inactivo casi una década antes de resurgir hace más de un año.
Los combatientes del M23 son acusados por civiles y grupos de derechos humanos de matar a civiles y secuestrar a personas. A principios de este mes, el grupo se retiró de gran parte del territorio que había capturado, como parte de un acuerdo de alto el fuego. Pero los residentes dijeron que siguen presentes.
El conflicto lleva décadas latente en el este del Congo, donde más de 120 grupos armados luchan en la región, sobre todo por la tierra y el control de ricas minas, mientras que otros grupos intentan proteger a sus comunidades.
Además de la creciente violencia del M23, los rebeldes de las milicias de la Cooperativa para el Desarrollo del Congo (CODECO) en la vecina provincia de Ituri también han intensificado los ataques.
El martes, 19 personas fueron asesinadas por CODECO en el territorio de Irumu, dijo Gili Gotabo, presidente del grupo de la sociedad civil de Irumu.